"El fin –según el decreto– es garantizar el cumplimiento de los planes de contingencia que se implementen, así como toda otra medida que se adopte y contribuya a abordar con eficacia las situaciones inherentes al fenómeno sísmico".
En declaraciones al canal C5N, Sapag explicó que la decisión se tomó luego de que el fin de semana se registraran 10.000 microsismos en la zona. Estimó, además, que en las próximas 72 horas el volcán “se va a manifestar” de alguna forma, lo que permitirá tener un diagnóstico más preciso sobre lo que puede pasar.
El estado de alerta máxima alcanza a la localidad de Caviahue-Copahue, zonas aledañas y toda región que pudiera ser alcanzada por los efectos de una eventual erupción.
Las personas que fueron evacuadas en las últimas horas eran recibidas y atendidas hoy en las localidades de Loncopué y Las Lajas. La mayoría optó por permanecer en casas de familiares residentes en la zona y algunos decidieron viajar hacia Zapala y la capital provincial.
"Se trabajó sin improvisaciones en la evacuación de 600 habitantes según los protocolos previstos", dijo Sapag hoy al visitar el lugar y reunirse con el comité de crisis.
El mandatario advirtió: "Los vulcanólogos hablan de que una erupción se puede producir en minutos, o en horas o en días, así que vamos a monitorear los primeros tres días para saber que está sucediendo en el interior del volcán".
Del lado chileno, el intendente de la Región del Bío Bío, Víctor Lobos, anunció que si empeora la situación, el ganado de las personas evacuadas –se evacuaron 2.200– podría también ser trasladado a una zona segura. Esta medida se adoptaría debido a que muchos agricultores de los alrededores del volcán no aceptan la evacuación si deben dejar sus animales, por la posible situación de abandono en que estos quedarían.
"Vamos a estar muy atentos y les pido a los medios que no dramaticemos, que no estigmaticemos los lugares porque esto es un evento de convivencia con un volcán", dijo.
Fuente: infobae.com