En la oportunidad, se proyectó un video de la Agrupación de Montaña Calchaquí y un documental realizado por el fotógrafo Eduardo Aroca y hubo un reconocimiento a los protagonistas de la expedición. También se homenajeó post-mortem a “Ñato” Peralta, Santiago Olmedo y Marcelo Brandán, ex miembros de la agrupación.
La Agrupación de Montaña Calchaquí es una institución deportiva con personería jurídica, fundada en el año 1955, cuyo principal objetivo es la práctica del montañismo.
Con el paso de los años, la agrupación fue creciendo y algunos de sus objetivos fueron: despertar en jóvenes catamarqueños la inquietud de conocer y ascender las alturas del Valle Central, flanqueado por los cordones Ambato y Ancasti; interesar a la sociedad catamarqueña en el acercamiento del departamento Antofagasta de la Sierra y ascender a sus volcanes; formar montañistas para enfrentar el desafío de la alta montaña; la promoción de las actividades de vida en la naturaleza, el conocimiento de la geografía provincial, la defensa del medioambiente, etc.
Entre sus objetivos fundacionales, la Agrupación Calchaquí pretendió al conquista de la cumbre del volcán Ojos del Salado (7.010 m.s.n.m), el activo más grande del mundo y situado dentro de Catamarca en la Cordillera de los Andes. Este objetivo recién pudo cumplirse 30 años después, cuando a fines de 1985, durante la presidencia de Eduardo Aroca.
Mucho trabajo, preparación física y psíquica, así como sumar otras instituciones como las universidades de Catamarca y de San Juan, Gendarmería Nacional, la Municipalidad de Fiambalá y el Club Andino Fiambalá. Fue un proceso que dio sus frutos cuando en enero de 1987 partieron rumbo a la cordillera catamarqueña 25 montañistas bajo el nombre de Expedición Kuntur.
El ascenso fue un éxito, 21 andinistas catamarqueños y sanjuaninos, divididos en dos frentes de ataque, lograron conquistar la cumbre del volcán Ojos del Salado entre el 27 y 29 de enero de 1987. Esto marcó un hito en el montañisno del NOA y a nivel nacional.
Esta hazaña fue formalmente el puntapié inicial de las actividades de alta montaña en Catamarca, que con el tiempo se fueron perfeccionando, tecnificando, y logrando altos niveles de seguridad y equipamiento.
Este 2012 se cumplieron 25 años de aquella conquista, que fue un disparador para impulsar la práctica de deportes de montaña.