Cabe destacar que las figuras más visibles de un hospital, como es la de Médicos y Enfermeros, y en ellos otros Profesionales y No Profesionales que integran este Equipo de Salud, en forma silenciosa y a veces sin ser visualizadas están realizando una tarea con la entrega y la responsabilidad que los convoca la misión.
En la nota señalan que “hoy cuando la demanda en el Hospital Público en muchas ocasiones se desborda y afecta la tolerancia, la emoción de quienes enfermos llegan al hospital, se transforma a veces en situaciones violentas donde el familiar y/o acompañante desespera rompiendo normas de orden que transforma la espera y la esperanza de sentirse mejor en un clima poco agradable para todos”.
La Comisión directiva indica que cuando alguien dice “La Salud pública es nefasta y el Hospital es un desastre” ofende a aproximadamente 5000 personas que trabajan en la Salud Pública, que con sus virtudes y defectos aportan a su tarea seriedad, compromiso, vocación, servicio, experiencia, idoneidad, dedicación, profesionalismo, tiempo y esfuerzo.
Asimismo, remarcaron que cuando alguien dice “nos tratan con desprecio o recibimos maltrato” desconoce a los cientos de miles de pacientes que son asistidos, internados, operados y rehabilitados ,que reciben atención especializada, alimentos, medicamentos, insumos, prótesis, consejo, afecto y conocimientos y no conoce a quienes buscaron ayuda y encontraron soluciones, compañía, apoyo o simplemente palabras de aliento.“
Cuando alguien se ocupa de fogonear airosos reclamos y protestas poco se detiene en el dolor del otro y habitualmente usa al que sufre para sacar un despreciable rédito político y/o económico”, señala la nota.
Para concluir, miembros del equipo que se desempeña diariamente en el Hospital aseveran que “la violencia no construye, apoyemos y defendamos a nuestra Salud Pública, ejerzamos nuestros derechos con responsabilidad y respeto”.