El agua de las piletas no es estéril, naturalmente contiene microorganismos pero se puede contaminar accidentalmente con algunos dañinos para las personas, como Giardias, Escherichia Colli, Shigella y algunos hongos que provienen de los propios bañistas. La utilización de cloro como agente blanqueador y purificador del agua en general, los destruye siempre y cuando se utilice en las proporciones adecuadas y con tiempo necesario para que actúe sobre los microorganismos. Por esto, los controles médicos y la propia responsabilidad ayudan a evitar esta contaminación.
Para tener en cuenta
Para protegerse de infecciones que se transmiten a través del agua es necesario tener en cuenta que los gérmenes de nuestro propio cuerpo terminan en la pileta, por eso:
* Evite ingresar si tiene diarrea. Puede propagar gérmenes que enfermarán a otras personas
* Evitar tragar agua
* Eduque a los niños para que no orinen en la pileta
* Si tiene que cambiar pañales, no hacerlo cerca del agua, utilice los sanitarios. Higienice bien al bebé y lavase las manos con agua y jabón.
* Los chicos también deben higienizarse cuando van al baño, para no contaminar el agua con materia fecal.
Acceso prohibido:
* En estados post operatorios y que existan heridas recientes para evitar que éstas se infecten
* Micosis (pie de atleta)
* Pediculosis, los piojos (pedículus capitis) nadan y contagian a otras personas
* Herpes en actividad, son heridas abiertas
* Diarreas
* Enfermedades eruptivas, se solicita que no asistan al club, hasta no tener el alta médica
* Verrugas en las manos, lesiones virósicas que pueden lastimarse
Recomendaciones
En aquellas personas que presentan otitis a repetición, especialmente en los chicos, es conveniente la utilización de tapones de siliconas en los oídos, para evitar que ingrese agua. Si hubiera antecedentes de rotura de la membrana timpánica es riesgoso sumergir la cabeza en el agua porque hay una vía de acceso directa a gérmenes hacia estructuras cerebrales.
Además de la vestimenta adecuada, gorro, traje, hojotas, se aconseja el uso de antiparras para evitar la acción irritante del cloro y poder mantener los ojos abiertos bajo el agua.
Enfermedades como psoriais y vitiligo, no son contagiosas, sólo causan molestias estéticas a quienes la padecen pero tienen acceso libre a las piscinas.
Por último, recordar que cada vez que se sale del agua se debe colocar nuevamente protector solar.