La ceremonia fue presidida por el párroco Oscar Alfredo Tapia, acompañado por un representante de la comunidad franciscana.
Tras la marcha procesional, que contó con la participación de un nutrido grupo de fieles, se celebró la misa comunitaria, a cuya finalización se impusieron las medallas a los nuevos socios de la Virgen de la Medalla Milagrosa.