Se trata de la madre del bebé, Liz Anahí Benítez; del supuesto padre biológico, Jorge Herrera; y de una mujer, en cuya casa, se habría realizado los contactos para la captación de vientres. Los tres fueron procesados por uso de instrumento ideológicamente falso y tentativa de estafa procesal, reveló ayer a EL LIBERAL el juez Donnola.
En tanto, el policía retirado y esposo de la presunta intermediaria, fue beneficiado con la falta de mérito.
La investigación se inició luego de que llegara un escrito anónimo que llegó al juzgado de Familia y que denunciaba supuestas irregularidades en los trámites de guarda para la entrega del bebé.
Efectivamente, la Justicia rosarina determinó que en los primeros días de abril había nacido en el Hospital Provincial, un bebé de la pinteña Liz Benítez, quien había sido trasladada por supuestos intermediarios desde la ciudad cabecera del departamento Agüirre hasta Rosario cuando el parto era inminente. Nacido el bebé, fue entregado en la vía pública a un matrimonio rosarino.
Para el resto de los acusados, que en total eran doce, el juez Donnola resolvió dictar el procesamiento de tres rosarinos, quienes se habrían encargaron de convencer y trasladar a Benítez a Rosario; además de encubrimiento agravado para otras cinco personas, todas de la vecina provincia.
En tanto, además del policía retirado pinteño, también los pretensos adoptantes fueron beneficiados con la falta de mérito.
Fuente: El Liberal