La policía logró su cometido y obtuvo una suba salarial del 54%, luego de que rechazara distintas ofertas realizadas previamente por el Ejecutivo provincial.
Ese porcentaje es el fruto del salto de la asignación por grado para el cargo de referencia (agente), de $ 1.950 a $ 3.000. Esta última cifra es la que tras arduas negociaciones figuró en el acta que firmaron anoche en el palacio gubernamental. Con este aumento, el sueldo de bolsillo de un agente asciende a unos $ 4.450, según calcularon los propios negociadores.
El acta acuerdo establece que sigue vigente el decreto 1950, que fija adicionales por categoría y cuya eliminación había sido uno de los principales móviles del paro. Además, se ratifica que el personal transitorio del Servicio Penitenciario pasará a la planta permanente.
Vale destacar que las autoridades gubernamentales asumieron el compromiso de no tomar ningún tipo de medida disciplinaria contra el personal de seguridad que partició de las medidas de fuerza.
El acta fue suscripta por los ministros de Gobierno, Edmundo Jiménez, y de Seguridad, Mario López Herrera, por el Gobierno.
"Yo no firmé nada. Yo me hago cargo de mis propios errores", ironizó, a la salida del encuentro, el ministro de Economía, Jorge Jiménez. También participó de la reunión el secretario de Hacienda, Rolando Steimberg.
"A partir de este momento la Policía vuelve a sus funciones", anunció un envalentonado Víctor Nacusse, quien fue uno de los líderes de la medida de fuerza, como así también uno de los principales negociadores, junto con Ángel Gabriel Palavecino, quien había sido denunciado por intento de sedición. (El Diario 24.com)