Catamarca
Jueves 25 de Abril de 2024
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Mons. Luis Urbanč, en la misa por la Jornada de las Comunicaciones Sociales

“Sin una sólida formación ética, los medios se transforman en el peor enemigo de la sociedad”

El domingo por la tarde, el Obispo Diocesano, Mons. Luis Urbanč, ofició una misa especial con motivo de celebrarse la 42º Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales, oportunidad en que se rogó por quienes trabajan y conducen los distintos medios de comunicación de nuestra diócesis.
(DIARIOC, 05/05/2008)En la primera parte de su homilía, el pastor diocesano se refirió a la Fiesta de la Ascensión de Jesús al cielo, destacando la importancia de la misma para la vida del cristiano.

Posteriormente, se refirió a los medios de comunicación social tomando como referencia el mensaje del Papa Benedicto XVI para este día. Al respecto, el pastor diocesano manifestó:

Estamos en este día celebrando en todo el mundo, invitando en todo el mundo a que se reflexione sobre esta riqueza que tiene el mundo contemporáneo como son los medios de comunicación social. Celebramos hoy la 42º Jornada Mundial de oración, de consideración, de estudio, de reflexión de lo que significan los medios de comunicación en nuestro mundo. ¿Dónde tiene su fundamento esto? En el testimonio, si nosotros tenemos que ser testigos, nosotros somos testigos de la verdad, testigos de esta verdad que ilumina la vida de los hombres de todos los tiempos, que encontrarán el verdadero sentido si dejamos que Cristo brille entre los hombres; el misterio del hombre sólo se esclarece a la luz del misterio del Verbo encarnado. Nosotros tenemos que propiciar, tenemos que anunciar esta verdad que es Jesucristo.

Al servicio del ser humano

Se nos decía al inicio de esta celebración cuál es el lema que se nos propone como síntesis de esta 42º Jornada; el Papa nos decía que “Los medios en la encrucijada entre protagonismo y servicio. Buscar la verdad para compartirla”. Los medios son esa encrucijada entre protagonismo y servicio. Una palabra interesante para reflexionar, en el mundo de hoy hay mucho protagonismo, pero ese protagonismo que va adquiriendo el ser humano con todos los avances tiene que estar al servicio del ser humano. Por eso dirá el Papa que tenemos que buscar la verdad. Los medios tienen que estar al servicio de esa búsqueda permanente de la verdad, esa verdad, mis queridos hermanos, es Jesucristo. Y nosotros, los cristianos, tenemos que estar convencidos de ello.

Parte constitutiva de nuestra vida

No sé cuántos de los que están acá trabajan en forma directa en los medios de comunicación, pero todos nosotros somos usuarios de los medios de comunicación, por tanto, a nosotros se nos interpela de un modo profundo acerca de cómo estamos incorporando a nuestras vidas los distintos medios de comunicación. Es un hecho que no podemos {adr}volver atrás respecto a las conquistas que el hombre actual ha conseguido en orden a los medios de comunicación. Este es un viaje sin vuelta, hay muchos que escuchamos que reniegan de los medios, eso está instalado. Gracias al avance de la ciencia y de la técnica, nosotros hemos llegado a popularizar tanto estos medios que ya son parte de nuestra cultura, parte constitutiva de nuestra vida, se han convertido en parte constitutiva de las relaciones interpersonales, sociales, económicas, políticas, culturales, religiosas. Los medios están instalados, y nadie los podrá sacar porque ya son parte de nuestra vida.

Facilitan el encuentro entre los hombres

Además, el hombre ha sido creado esencialmente por Dios para ser un ser sociable, es decir se tiene que comunicar; la comunicación es el nexo permanente que permite que nosotros nos vayamos desarrollando como seres humanos. No hemos sido creados para vivir aislados sino para comunicarnos, para dialogar, para compartir.

Y estos medios, fortalecidos por las ciencia y por la técnica han llegado facilitar este lugar de encuentro entre los seres humanos, han alcanzado potencialidades inimaginables en cuanto a globalizar el flujo de las noticias de todo tipo y a la difusión del saber, lo cual ha favorecido en gran medida la comprensión entre las naciones, la búsqueda de la paz mundial, a través de la libre circulación del pensamiento en orden a la justicia y a la solidaridad. Mucho se habla, mucho se debate y sobre todo el fenómeno de hoy es la globalización de la información. No hace falta un año para que llegue la noticia, está al instante en todos los rincones del mundo. Se nos dice que vivimos hoy en una aldea a pesar de que somos millones de personas. El mundo se ha hecho cercano, a todos, eso lo ha conseguido gracias al avance de la ciencia y la técnica. Esto es algo muy bueno, pero lo importante es cómo se utilizan estas herramientas, estos instrumentos de comunicación y es ahí adonde tenemos que apuntar la reflexión.

La manipulación es un gran peligro

Es evidente que hay grandes ganancias, y también hay grandes peligros. Un peligro muy serio es que se puedan instrumentalizar estos medios de comunicación para someter al hombre a lógicas dictadas por intereses dominantes del momento, esos intereses pueden estar manipulados por ideologías, por sistemas económicos, por el secularismo, por el consumismo, el nihilismo, mediante modelos ajenos a la dignidad personal, familiar y social. El problema de que estos medios se instrumenten para manipular, para someter al ser humano a intereses totalmente ajenos a la dignidad del hombre y de la mujer, la manipulación es un gran peligro, y como esto invade todos los ámbitos donde vive el ser humano es peligroso. Lo más grave es que estos medios se introducen nuestros hogares, y ahí trabajan metiendo criterios, que posiblemente nosotros rechazamos, pero que están ahí adentro, y se van incorporando sin que nosotros nos demos cuenta, sobre todo ese fenómeno que llamamos el secularismo.


Si estos medios son utilizados de un modo perverso, de un modo manipulador, a través del secularismo nos van borrando la presencia de Dios en nuestra sociedad; lo vamos arrumbando a Dios en un lugar donde no nos moleste, se lo niega, se lo excluye, Dios ya no es persona grata en la sociedad, y mucho de este peligro lo tenemos en manos de estos medios que, manipulados, utilizados por ideologías o el secularismo, nos pueden ir arrinconando a una esclavitud que se la vive pero se la declama como verdadera libertad, esa ambigüedad en los conceptos, que nos van llevando a creer que somos libres cuando somos tremendamente esclavos porque hemos sido ya manipulados. Se corre el peligro, por tanto, de la manipulación y algo terrible: el lavado de cerebro, el adormecimiento de la conciencia; más aún a degenerar la conciencia que es la que nos tiene que ayudar a descubrir qué es lo que está bien y a distinguirlo de lo que está mal.

Al servicio de la dignificación de las personas

¿Cuál es el cometido de la comunicación? La comunicación está al servicio de la socialización de las personas, del encuentro entre las personas, de la dignificación de la vida humana, hacia eso están orientados, y si nosotros a estos medios, puestos en manos de grandes capitales y de ideologías, que no buscan el bien común, que no buscan el bien de la persona, lo van destruyendo.

Y nosotros, los usuarios de los medios, tenemos que saber discernir hacia dónde se orientan los mensajes, las propuestas que nos están dando estos medios. Cuando la comunicación pierde la raíz ética y elude el control social, termina por olvidar la centralidad y la dignidad inviolable del ser humano, y corre el riesgo de manipular la conciencia y su libertad a la hora de decidir o de elegir. Nosotros todos los días elegimos, y tenemos que elegir bien. Ahora, si están presentes estos instrumentos en manos nefastas nos van a llevar a elegir mal. Por eso se hace imperiosa una sólida formación ética en el ciudadano, y en todos aquellos que trabajan en estos medios de comunicación; sin una sólida formación ética, estos medios se transforman en el peor enemigo de nuestra sociedad; se transforman en una peste en nuestra sociedad.

La búsqueda de la verdad

Hay que evitar que los medios de comunicación se conviertan en el megáfono del materialismo económico y del relativismo ético, verdaderas pestes de nuestro tiempo. Materialismo económico, lo único que interesa es el crecimiento económico, entonces quiere decir que el ser humano está puesto como esclavo del bienestar económico; y lo más triste cuando se cae en el relativismo ético, que cuando está dominado por el principio maquiavélico que dice que el fin justifica los medios. Tan común, tan aceptado entre nosotros, ese permisivismo va en contra de la dignidad del ser humano. Por tanto, el cometido de los medios debe ser la búsqueda y la presentación de la verdad de quién es el hombre y su vocación de felicidad eterna.

Tenemos una hermosa herramienta para crecer, pero también esta herramienta tan hermosa, que en nuestros tiempos podemos disfrutar, se puede volver en contra de nosotros mismos. Y con esta herramienta podemos destruirnos a nosotros mismos progresivamente. Por tanto, estos medios de comunicación social nos tienen que ayudar a nosotros a ser testigos de Jesucristo, que es la verdad que ilumina a todo hombre, de Jesucristo, que es el que trae la verdadera libertad al ser humano, de Jesucristo que es el camino que nos conduce a la felicidad eterna.

Tenemos que saber utilizar los medios

Nosotros, los cristianos, si trabajamos en los medios y utilizamos estos medios, tenemos que saber discernir si ese instrumento está al servicio del hombre o en contra de la dignidad del hombre. Y en esto no podemos mirar para otra parte, en esto no podemos maldecir por qué existen estos medios. Los medios están, los instrumentos están, nosotros tenemos que saberlos utilizar y manejar y saber dejar de lado aquello que no ayuda al crecimiento y la dignificación del ser humano.

Pidamos al Señor, como lo decía el apóstol San Pablo, que Jesucristo nos conceda ese espíritu de sabiduría y de revelación, que nos permita conocerlo verdaderamente. Y cuando tengamos esa sabiduría a flor de piel, que nos brote en toda instancia de nuestra vida, entonces podremos tener la capacidad para poder discernir todo aquello que viene de Dios y nos lleva a Dios, y para saber utilizar aquellos medios que nos ayuden a conocer más a Dios y por supuesto también para poder ayudar a los demás a que conozcan a Dios, a que conozcan a Jesucristo que es su Enviado y Salvador del mundo.

Le pidamos al Señor que nos conceda la gracia que sepamos poner todos los días la mirada en el cielo, que busquemos los bienes del cielo, y que sepamos ordenar las cosas de este mundo de tal manera que nos lleven a poder alcanzar los bienes imperecederos del cielo, de la vida eterna para la que todos nosotros hemos sido creados.

Que así sea

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Comentarios de nuestros lectores: (1)
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Por un periodismo serio y responsable
Por: Estela el 05-05-2008 a las 17:44
Coincido plenamente con las enunciaciones del Obispo. En Catamarca, en el interior y el paí­s, nos encontramos con comunicadores sociales pocos serios, creibles y ellos son los portadores de la verdad, lo que no tienen voz. Como Licenciado en Comunicación Social, quiero expresar que muchos colegas hablan, escriben, crean, simulan falacias sin sustento, sin chequear fuentes, sin el más mí­nimo interés por la indagatoria. Uno de esos medios es Catamarca Actual, que con tanta simpleza escribe desde una postura in-creible. Los medios se molestan con el observatorio de medios, se enfadan con la nueva ley de radiodifusión, quienes "somos" para decir lo que está bien y mal, somos simplemente árbitros de realidades, que muchas veces la hacemos sin responsabilidad.



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