Así lo confirmó la fiscal cordobesa María Antonia de la Rúa, quien indicó que según la necropsia la nena fue arrojada al pozo el mismo día en que fue encontrada muerta su mamá, Mirta Arias.
De la Rúa señaló que la niña cayó viva al fondo del pozo y en el agua murió por un "shock cardiogénico irreversible", influido por el estrés vivido en los momentos previos, una fractura en el fémur, y la temperatura del agua del pozo.
"No hay dudas que fue arrojada viva. El forense estima que la muerte data de 4 días, eso nos ubicaría en el día lunes, día del fallecimiento de la madre", explicó la funcionaria judicial en declaraciones a la Radio Universitaria local.
Sofía fue asesinada por Gustavo Rolando Gaitán Juncos, de 23 años, quien tras matar a la madre de la pequeña en una casa de barrio Sacchi, raptó a la criatura, la arrojó viva al pozo y luego se suicidó en una cantera de Malagueño, al oeste de esta ciudad.
La búsqueda de la menor tuvo en vilo a toda la opinión pública hasta la aparición el pasado viernes cerca de un molino abandonado, en un pozo de unos 40 metros, entre las canteras de Malagueño y barrio Sacchi.
"La autopsia de Juncos demuestran que murió también el lunes por un fuerte traumatismo de cráneo", afirmó la fiscal De la Rúa sobre la muerte del asesino, quien se lanzó de un risco e impactó su cabeza contra una piedra.
Fuente/ 26noticias.com.ar