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Viernes 29 de Marzo de 2024
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Torres de Mansilla afirmó que no se trata de una ley abortiva

Luego que el Senado de la Nación convirtiera en ley el proyecto de Salud Reproductiva, se retoma el debate en la provincia sobre esta misma temática. En la legislatura local existen dos iniciativas, una de ellas pertenece al senador Gustavo Roque Jalile(FCyS), que obtuvo media sanción de la Cámara de Senadores, mientras que la otra es de autoría de la diputada Marta Torres de Mansilla(FCyS). Esta última defendió su propuesta expresando que“no se trata de una ley abortiva”y señaló que se trata de“un problema cultural que debe ser atendido por el Estado”

Luego que el Senado de la Nación convirtiera en ley el proyecto de Salud Reproductiva, se retoma el debate en la provincia sobre esta misma temática. En la legislatura local existen dos iniciativas, una de ellas pertenece al senador Gustavo Roque Jalile(FCyS), que obtuvo media sanción de la Cámara de Senadores, mientras que la otra es de autoría de la diputada Marta Torres de Mansilla(FCyS). Esta última defendió su propuesta expresando que“no se trata de una ley abortiva”y señaló que se trata de“un problema cultural que debe ser atendido por el Estado

Ambos proyectos están radicados en la Cámara de Diputados, habiendo sido girados oportunamente a las comisiones de Cultura y Educación, Salud Pública y Legislación General para su tratamiento conjunto.

La legisladora comentó que, como dato particular, en su iniciativa se incorpora como innovación el hecho de nominar como autoridades de aplicación al Ministerio de Salud y Acción Social, pero también al Ministerio de Educación.“Se entiende que estamos frente a un problema de gravedad inusitada que afecta transversalmente a la sociedad en su conjunto, pero más a los sectores de menores recursos, tanto en lo económico como en su capacidad cultural, lo cual no obsta que sea también un problema que gravite en los sectores medios y de mayores recursos”, explicó y puntualizó que al tratarse de un problema cultural,“debe ser atendido en forma inmediata por el Estado y transversalmente con un enfoque multidisciplinario de la cuestión y haciendo hincapié fundamentalmente en la línea educativa de ataque al problema

Torres de Mansilla, consideró que“es imprescindible crear conciencia de la responsabilidad con la que debe asumirse una relación de pareja, la actividad sexual, la procreación responsable, la maternidad responsable y la paternidad responsable”, y destacó que“en todo este largo debate que ha habido sobre el tema quedó muy claro que más allá de las creencias religiosas, de uno u otro signo confesional, o por fuera de los lineamientos religiosos, todos acordamos como objetivo fundamental el preservar la vida

Indicó que en ese sentido merece hacer una acotación“que es fundamental, porque defender la vida no sólo implica la posibilidad de nacer, sino que significa defender también la calidad de vida y que el nuevo ser tenga la posibilidad de gozar de los derechos que como ser humano debe tener, de un núcleo familiar que lo contenga no sólo material sino afectivamente, y de que realmente lo que es un derecho básico como la igualdad de posibilidades en términos de proyectos de vida pueda ser un hecho real y no una mera declamación

Con relación a las observaciones realizadas por la Iglesia, Torres de Mansilla aclaró que“esta no es una ley abortiva, ni que legalice prácticas abortivas”, al tiempo que remarcó que“debemos tomar conciencia que este es un hecho de la realidad, que es una de las principales causas de muerte materna, sobre todo para quienes practican el aborto no en las condiciones de asepsia sino que precisamente  por su nivel económico lo hacen del peor modo posible y no sólo que están matando al nuevo ser sino que muere también la madre y quedan huérfanos todos los niños que tiene, produciéndose un verdadero drama familiar” La diputada frentista no dejó de observar además“el nivel de hipocresía muy grande cuando hablamos de este tema, porque el aborto es una de las industrias que mueve millones en la Argentina, lo cual también es ilegal, pero en las sombras quienes pueden pagar lo hacen y con seguridad de vida para la madre

Con respecto a la posición de la Iglesia, comentó que en la propuesta alternativa presentada en su momento por el Obispado de Catamarca“ellos aceptan la necesidad de crear un programa de procreación responsable, pero admitiendo solamente los denominados métodos naturales” Al respecto, reveló que del material que sobre este punto hizo llegar el doctor Soberón“surge evidente el nivel de formación cultural y hasta filosófica y la necesidad de la integración en la relación amorosa de la pareja de respeto mutuo que es también un hecho de la realidad, que no es de lo más común y menos en sectores sociales donde los derechos más elementales de la mujer son violentados

Añadió que“estos otros métodos propuestos y que las actividades científicas de más alto nivel aseguran que no son abortivos, sino solamente preventivo y si en calidad de tales están certificados por la ANMAT, es decir reconocidos por el Ministerio de Salud de la Nación como no perjudiciales, como no abortivos, como no lesivos para la salud de la madre y como reversibles, es decir que ante la decisión de la pareja porque sus condiciones cambiaron desde lo económico o porque desde lo afectivo están dispuestos y con la decisión asumida de tener en ese momento un hijo para criarlo como corresponde, entonces el método anticonceptivo puede ser revertido y producirse el embarazo, el alumbramiento y la crianza del hijo en las condiciones en que éste merece llegar al mundo

Finalmente, recordando que la temática fue motivo de tratamiento incluso antes de la presentación del proyecto del senador Gustavo Jalile y mencionó que en  la Cámara de Diputados se aprobó por unanimidad un proyecto de declaración por ella presentado, declarando de interés legislativo las Jornadas de Trabajo organizadas por la Sociedad de Ginecología de Catamarca sobre esta misma cuestión, realizadas en el Círculo Médico, en la que disertó el doctor Roberto Nicholson y su equipo de profesionales, manifestó que el debate“lleva mucho tiempo y en algún momento fue virulento y después hubo reuniones muy positivas en la Cámara de Diputados con miembros del Obispado y Asociaciones de Familias Cristianas, y luego el tema dejó de ser tratado en las comisiones. Ahora, la aprobación de la ley nacional de hecho abre nuevamente el debate, y como lo expresó el senador Jalile, yo también espero que podamos abocarnos al tratamiento de los dos proyectos

(Prensa Diputados)


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