Esta mañana, Roxana, la madre de la adolescente Mabel Guerra (17) muerta por los disparos del prefecto, aseguró que su hija fue víctima de un caso de "gatillo fácil" y negó que ella y la otra chica estuvieran armadas o hayan intentado cometer un asalto.
"Ella no tenía arma, si ella hubiera tenido un arma era el tipo el que estaba muerto, el auto hubiese tenido balas, hubiese tirado, se hubiese defendido, cualquiera que hubiese tenido armas se defendía", expresó la mujer. "Quiero Justicia para mi hija, que se limpie el nombre" agregó Roxana.
Sobre la otra joven baleada en el hecho, Marisol Lobos (21), embarazada, permanecía hoy internada con en el hospital Fernández a raíz de una herida en un ojo y con consigna policial, dijeron a Télam fuentes policiales.
El hecho, que derivó ayer en un enfrentamiento entre vecinos del asentamiento y efectivos de Prefectura, se registró la noche del miércoles en la avenida Ramón Castillo y el Correo Viejo, a la salida de la autopista Illia, frente a la entrada de la Dársena E del puerto, en Retiro.
Allí, el buzo de la PNA Luque (38) se trasladaba de regreso a su casa a bordo de su auto Fiat Palio y paró en un semáforo, momento en que, según su versión, dos chicas se acercaron para robarle. Según la versión del suboficial, las jóvenes lo amenazaron con algo similar a un arma de fuego, por lo que sacó su pistola reglamentaria, disparó y ambas jóvenes fueron heridas.
A raíz de un disparo que le ingresó por una de las axilas, Mabel Guerra murió, mientras que su amiga Marisol Lobos sufrió un roce o impacto de una esquirla en su ojo izquierdo.
{adr}Mabel llegó muerta al centro asistencial, mientras que Marisol permanece aún internada y, según su hermana, Carmen Lobos, perdió el embarazo a raíz de las lesiones sufridas. La hermana de Lobos y dos amigas de las víctimas aseguraron a Télam que ninguna de las jóvenes eran ladronas o estaban armadas.
Por su parte, el secretario de la PNA, Juan Alfredo Rempel, dijo hoy a Télam, que la versión que dio el suboficial -preventivamente separado de su actividad operativa en la fuerza- es que se resistió a un asalto y cree "no tuvo intenciones de matar".
Tras el episodio, policías de la comisaría 46 secuestraron en la zona dos caños y palos, "réplicas muy caseras de armas", que se cree Guerra y Lobos emplearon para amenazar al prefecto.
Ayer, a raíz del hecho, vecinos de la villa se enfrentaron con la Prefectura e Infantería de la policía, durante una seguidilla de incidentes que se iniciaron con un reclamo de Justicia.
Durante los incidentes, los manifestantes quemaron un puesto de la PNA del que se llevaron uniformes y hubo varias detenciones. Cerca de las 17, con la liberación de los manifestantes, los ánimos se calmaron, aunque los vecinos dijeron que esta tarde realizarán una nueva manifestación en reclamo de Justicia.(Telam)
