Unos 200 trabajadores de rescate y 500 voluntarios se encontraban hoy en el lugar de la tragedia auxiliando a víctimas e intentando rescatar sobrevivientes sepultados por el lodo, en tanto la falta de equipos y herramientas complica las operaciones, por lo que los auxilios utilizan sus manos para escarbar en el barro.
Además, el lodo, blando y acuoso impide que excavadoras pesadas lleguen al lugar, para actuar con celeridad.
Fuente: Télam