Cuarenta y cuatro cuadros realizados con drogas -la mitad abstractos y la mitad figurativos- fueron reunidos por el artista el lunes pasado en Maria Kirkeplads, uno de los lugares de Copenhague donde se reúnen los toxicómanos.
Evaristi se aseguró la "legalidad" de la acción mezclando la droga, comprada ilegalmente y colectada en los restos de las jeringas tiradas por toxicómanos, con cremas e insecticidas, a fin de tornarla inconsumible. (Télam-SNI)