"Presentamos 25 fotografías; Friedman tenía la particularidad de hacer sus fotos e imprimirlas en un formato muy poco común para su época, 40 x 50 o 50 x 60, cuando las imágenes vintage son mucho más pequeñas. Y estas al ser más grandes lucen mucho más", cuenta Pellegrini, curadora de la exposición en diálogo con Télam.
Este material, "si no lo reivindicamos se pierde, en las ferias internacionales es increíble lo que valoran la foto vintage, casi ha desaparecido en muchos países. Se vendieron o se perdieron los archivos, está bueno que podamos traer al presente estas figuras", considera.
Fuente: Télam