A los bailarines se sumó la orquesta Vale Tango, dirigida por el maestro Andrés Linetzky de la ciudad de Buenos Aires y el director coreográfico del show fue Roberto Herrera, uno de los íconos y promotores más importantes del tango en el exterior, quien tuvo a su cargo la puesta en escena.
“Los shows programados se llevaron a cabo en ocho ciudades de Japón, en los teatros más imponentes, colmados de aficionados y fanáticos del tango, gente cálida y sencilla que aprecian y aman esta danza”, contó aún emocionada Verónica, quien hace tres años y medio integra la pareja de baile junto a Diego Leiva.
Sapporo, Yokohama, Nagoya, Yonago, Yokosuka, Takayama, Assakusa y Tokio –donde participaron del Festival Gran Milonga- fueron las ciudades niponas por donde Verónica y Diego fueron de gira.
“Fue una experiencia maravillosa para nosotros poder vivenciar cómo se siente el tango desde ese país tan imponente. Todo lo que pudimos apreciar y crecer como personas, bailarines y artistas es muy nutritivo para nuestra carrera” señalaron y se manifestaron orgullosos de haber podido representar a Argentina y particularmente a Catamarca en ese país.
Los bailarines ya trabajan por un nuevo desafío: representar a Catamarca, en el mes de agosto, en el Mundial de Tango 2014, que convocará a más de 300 parejas de todo el planeta.
Verónica y Diego suman este último logro en Japón a una serie de lauros que, como pareja, han venido cosechando en su carrera. En 2013 fueron finalistas del Mundial de Tango en la categoría tango pista y semifinalistas en tango escenario. En 2012 resultaron elegidos campeones nacionales de tango escenario en el certamen de Baradero y, ese mismo año, fueron subcampeones de tango salón en la subsede NOA del pre-mundial de Tango.
