Sin lugar a dudas, el autor de Sobreviviendo fue la figura central de la noche, brindando un buen show. Heredia, quien subió cerca promediando la noche y se fue una hora y media después, puso sobre escena clásicos como lo son Ojos de Cielo, El viejo Matías y Bailando con tu Sombra y que marcaron el inicio de un romance entre Heredia y su público.
Después de más de cuarenta años de trayectoria, Víctor Heredia acaba de editar Ciudadano, un CD en el que sin renunciar a su sello en su temática y en el tratamiento de la palabra, marca un cambio en el sonido que lo acompaña desde hace un par de décadas. Vestido informalmente, este juglar urbano emocionó a los catamarqueños con otras canciones como Razón de vivir, y Sobreviviendo.
La apertura de la noche estuvo a cargo del Ballet Atahualpa Yupanqui, conducido por el profesor César Reinoso, que puso sobre escena diferentes cuadros que brindaron el color a la noche inaugural.
Voces nativas
En forma conjunta con Heredia, diferentes voces catamarqueñas se conjugaron para aportar un variado y colorido repertorio y de los cuales sobresalieron el rodeino Ricardo Torito Arce, Néstor Pacheco, y el reconocido conjunto Americanta, conformados por Miguel Melián, Lucio López y Luís Medina.
También de sumaron a esta propuesta Norma Halmallán, el Dúo Varela-Zabaleta, el creciente grupo santamariano Noemí Gramajo y La Plica, y el humor a través del consagrado Mingo Agüirre; Los Luceros de Mutquín, el ritmo de chamamé de la mano de Emmanuel y el Grupo Reencuentro; y la música del dos por cuatro de la mano del maestro Luís Castellanos.
Así, se escucharon Camino al Rodeo, La Telesita, Carnaval en La Rioja, Cántale Chango a Mi Tierra, entre otros; mientras que Paisaje de Catamarca fue elegido a modo de cierre y cantado por todos, cantores y público.
La conducción de la más catamarqueña de las fiestas estuvo a cargo de Mariana Ventrice, y el recitador catamarqueño Lulo Nieto, mientras que la coordinación se haya a cargo de Gabriela Ávila.