Catamarca
Jueves 28 de Marzo de 2024
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Vuelve "La hora de Clarice", el homenaje mundial a Lispector en Buenos Aires

Por segundo año consecutivo, Buenos Aires se suma a las celebraciones mundiales de "La hora de Clarice", un homenaje multidisciplinario al aire libre el próximo sábado en la plaza del Museo del Libro y de la Lengua.
Artistas, escritores y lectores rendirán tributo a Clarice Lispector, una de las autoras más importantes en lengua portuguesa del siglo XX, de las más leí­das en la Argentina y también de las más misteriosas de la literatura.


Como emulación del Bloomsday de James Joyce que se hace todos los 16 de junio por las calles de Dublín, "La hora de Clarice" está comenzando a instalarse de la mano de Gonzalo Aguilar, Carmen Güiraldes y Constanza Penacini, los organizadores independientes que pensaron una estructura mutable con teatro, danza, música, literatura, talleres, narraciones, debates, artes visuales y performances para celebrar a la escritora.

"Queremos instalar el evento y que se mantenga -por eso el esquema se repite con diferentes personas, gente que hace cosas vinculadas con Clarice- y que esos mundos sean un ida y vuelta, que haya un marco y se pueda improvisar para convertirse en un espacio de referencia", precisa a Télam Aguilar, organizador, director de la Colección Vereda Brasil de Corregidor y titular de la cátedra de Literatura brasileña y portuguesa de la UBA.

Por segunda vez -el año pasado fueron más de 200 personas- se realiza esta peculiar "hora" que arrancará a las 17, cuando el calor decembrino baje, y terminará pasadas las 21, en los jardines del Museo del Libro y de la Lengua de la Biblioteca Nacional (Las Heras 2555). Será gratis, amigable y se suspende por lluvia.

La frase unificadora de este año será "Pan y amor entre desconocidos", extraída del cuento "El reparto de los panes" del libro "La legión extrajera", una poética invitación a compartir música con Gaby Comte, María Ezquiaga y Surales; la performance audiovisual "La sombra de Clarice. Crónicas y proyecciones", de Lorena Croceri, Juliana Corbelli y Julia Vallejo Puszkin y una instalación de Marina de Caro con curaduría de Mariela Scafati.

También se presentará otra instalación llamada "El gabinete de las maravillas según GH" con varios artistas; un taller de fotografía abierto con María Laura Vázquez; narración para niños a cargo de Marisa Lorda; danza con dirección de Fabiana Capriotti; una perfomance de Alina Marinelli; teatro con Julieta Eskenazi y lecturas en las voces de Vanesa Guerra, Mónica Herrero, Mariana Docampo, Mario Cámara, Adriana Kogan y Laura Cabezas.

La fascinación que genera Lispector (Ucrania, 10 de diciembre de 1920-Rí­o de Janeiro, 9 de diciembre de 1977), quien definí­a su estilo como un "no-estilo" y que dejó ocho novelas, ocho volúmenes de cuentos y cuatro libros de niños e innumerables crónicas periodí­sticas, tiene que ver con el hecho de repensar la experiencia social y cotidiana desde lo íntimo, pero también con las múltiples lecturas que obedece su obra en vías de convertirse en un clásico.

Pero, entonces, ¿qué más se puede decir de esta misteriosa dama de las letras brasileñas cuya literatura nunca pudo ser encasillada en las corrientes de la época, sino que trascendió a un lenguaje mucho más universal?

"Cuando un escritor se transforma en un clásico -y Clarice está en el camino hacia un clásico dinámico- lo que se va produciendo es que admite una cantidad de lecturas que, bien podrían ser infinitas, y se van renovando, porque un clásico soporta eso", explica Aguilar, que subraya que este caso es "especial" porque "en todo el trayecto ha recibido lecturas tan disimiles como contrapuestas".

"Hubo lecturas desde lo fantástico; desde el feminismo europeo; a partir de minorías; con la mirada a partir de vida íntima y la vida pública y, últimamente, sobre la relación con la animalidad y la vida desnuda. Son temas teóricos que proporcionan nuevas respuestas y perspectivas. Son textos muy plásticos a las problemáticas que se fueron planteando", dice el especialista y abona la idea que Clarice no defrauda porque "se puede leer algo nuevo en cada época".

Pero, también la vigencia y el dinamismo de la obra de la autora de la "La hora de la estrella" aparece en la arena de lo afectivo. Según Aguilar, Lispector juega el papel similar al de Cortázar en tanto "lectura iniciática", algo que en los jóvenes, en su mayoría mujeres, genera "un vínculo muy fuerte, afectivo, intelectual y literario, un descubrimiento muy poderoso y de mucha fidelidad".

En la Argentina, la obra de Lispector circula masivamente y está editada por tres sellos importantes -Corregidor, Cuenco de Plata y Adriana Hidalgo- pero también es una de las escritoras más citadas en Twitter; en Facebook hay más de una veintena de aplicaciones y unas treinta páginas como "Dosis de Clarice Lispector" y "Consejos de Clarice", que tienen más de 600.000 "me gusta".

En Brasil es la segunda escritora más estudiada con 8.000 tesis allí y 3.000 en otros paí­ses, después de Machado de Assis, con especial énfasis en las novelas, los cuentos y las columnas de prensa.

Lejos del malditismo o la oscuridad que pudieron rodear a otras autoras, Lispector trabajaba en "la política de los afectos" amalgamada en una escritura de ideas, en manos de una mujer que se construyó a sí misma como un mito con un aura de misterio.
"La recuerdo con una máquina de escribir en su regazo, tecleando absorta en medio del salón principal de la casa entre los ruidos de los niños, el teléfono o la empleada. Por tanto, no tení­a nada de escritora maldita que necesitaba aislarse del mundo para encontrar la inspiración", dijo su hijo Paulo Gurgel en una entrevista.

Pero el dato de la mujer orquesta que escribe "para personas con el alma bien formada" como dijo alguna vez la propia Clarice sobre una de sus novelas, mientras le saca un moco a uno de sus hijos refuerza su calidad de misteriosa.

Por eso, este sábado, uno de los temas centrales será la charla "¿Qué misterio tiene Clarice?", en los análisis de Mario Cámara, Gabriel Giorgi, Florencia Fragasso, un título que referencia a una canción de Caetano Veloso.

"La gran diferencia entre misterio y enigma, es que el último encuentra resolución, mientras que el misterio es lo que se sostiene sin ser revelado, lo que no tiene clave. Julio Cortázar es un escritor del enigma y Clarice, del misterio. En su caso tiene un sentido muy preciso, no hay nada que develar sino que se mantiene como una grieta y no es interpretable", explica Aguilar.

Tanto se hablo de su misterio, incluso cuando vivía o cuando los periodistas se iban frustrados y enojados por no poder sonsacarle una línea, que ella misma, la propia escritora bella y sigilosa, decía irónicamente frases como "soy tan misteriosa que no me entiendo" o "mi misterio es no tener ningún misterio", prestándose a un juego que este sábado muchos de sus adictos tratarán de recrear.

Como una divisa que une arte con devoción, Clarice Lispector será homenajeada el próximo sábado desde las 17 en la Plaza Boris Spivacow, Las Heras 2555. Será gratis y habrá puestos de venta de bebidas y refrigerios y de venta de libros de la autora.

Fuente: Télam

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