Tras el arribo Luisa Aguaysol, una de las santamarianas residentes en Caleta expresó “estamos llegando con los peregrinos de Caleta Olivia quienes venimos desde hace 10 años, en esta oportunidad somos 62 pasajeros que venimos con una alegría enorme.
Una de las cosas que nos trae es la fe a San Roque, aunque no todo el contingente es de santamarianos, venimos a cumplir nuestras promesas a San Roque y con nosotros viene gente de otros lugares, de otras provincias y del vecino País de Chile, la gente esta muy contenta de venir. Personalmente tengo acá mi familia, mis abuelos, tíos, como otros que venimos ávidos de alegría, más aún porque la gente de Santa María siempre nos recibe a corazón abierto. Ahora mucho más con el acompañamiento del Intendente Jorge Andersch”, expresó Luisa quien agregó “saludo a toda la gente de mi pueblo en nombre del Presidente Carlos Aguaysol quien no pudo venir porque cuestiones de salud”.
Por su parte, el Intendente Andersch agasajó a la comitiva en un emotivo acto donde se entregaron las Llaves de la Ciudad, también se dio lectura a un Decreto emanado del Concejo Deliberante en coincidencia de esta visita. Tras emotivos momentos donde los caletenses también entregaron presentes, Andersch expresó “esta es una merecida bienvenida a los santamarianos que alguna vez se fueron en busca de un futuro mejor, pero que sus raíces nunca han dejado de pertenecer a Santa María, lo he podido constatar cuando visite varias casas en esa ciudad, ellos nunca perdieron las costumbres sanas de los santamarianos. Este recibimiento es solo una mínima parte de lo que ellos se merecen, lo tienen ganado y ojalá continúen viniendo cada año a esta, su tierra”, dijo el Intendente emocionado hasta las lágrimas tras la demostración de cariño de los recién llegados.
“El Presidente de los residentes en Caleta don Carlos Aguaysol siempre ha venido trabajando por el Centro de Residentes Santamarianos en Caleta Olivia, he tenido la suerte de acompañarlos en la inauguración de su Sede y la verdad que nos dan un ejemplo de vida, nos muestran que por ahí, las cuestiones personales y el egoísmo propio no llevan a ningún lado, han demostrado que todos unidos pueden hacer muchas cosas más. Nosotros desde acá vamos a seguir trabajando y acompañando en lo que podamos cada vez que nos necesiten. Esto no solo se trata solo de una visita sino de muchas cosas, en lo profundo es amor a esta tierra, el mantener las raíces vivas por eso abrazamos a nuestros hermanos y agradecemos desde lo mas profundo de nuestro corazón”, así se refirió Andersch quien recibió una Bandera de los peregrinos, un tapiz de la región y hasta bailó una cueca con una de las recién llegadas.