Quintar personalmente se reunió con gente del ministerio de educación, los cuales se dirigen en el día de la fecha a esa población para constatar y realizar un relevamiento de todos los daños ocurridos.
Por suerte solo se puede lamentar daños materiales por que en ese momento no se encontraban alumnos dentro del establecimiento.
Problemas similares con el viento cordillerano, están pasando las otras instituciones escolares del distrito Fiambalá, sin sufrir grandes daños materiales pero con poca asistencia de alumnos ya que muchos de ellos deben recorrer grandes distancias por el campo para llegar a la escuela sumado a esto el gran obstáculo meteorológico que deben sufrir los docentes día a día.
Fuente: Fiambalá Hoy