Lo que más agrava esta situación es que la mayoría de las familias que viven en estos alejados puestos, se sustentan de la crianza de animales por no contar con otros ingresos económicos.
El número de caprinos y ovinos que existen en la zona superan las 15.000 cabezas, a diferencia de 9.000 vacunos en toda la jurisdicción. Los más afectados fueron las crías o animales más pequeños, siendo como causa principal la falta de refugio lo que motivó que no pudiesen superar las bajas temperaturas que superaron los -25° (bajo cero).
Las autoridades que estuvieron a cargo de este extenso recorrido fueron la Secretaria de Desarrollo y Bienestar Social, Lic. Roxana Carrizo y el Director General de esa área Ángel Perea; el concejal Ramón Reales, Director Gral. de Gbrno. Ramón Quiroga y David Cabrera, Director de Defensa Civil, quienes se encuentran abocados en la realización de proyectos para conseguir fondos de manera urgente para ayudar a estas familias. Mientras tanto se les llevo alimentos, abrigos, agua y remedios.
Para encarar este tipo de emergencias existe el dinero necesario en el gobierno provincial y nacional, pero lamentablemente e irrisoriamente la burocracia obliga a realizar proyectos, a sabiendas de lo que significa en tiempo, sin tener en cuenta la urgencia que requiere este tipo de casos.
Desgraciadamente estos pobladores que viven haciendo patria en medio de las montañas, sufriendo las inclemencias del tiempo, agobiados por la pobreza, deben esperar que otros señores de corbata decidan desde un escritorio, tomando café en ambiente climatizado, que es lo que van a hacer con el dinero de los demás Argentinos.