Todos estos inconvenientes mencionados lo habrían detectado la comisión evaluadora de concesiones, la cual está conformada por varias personas del ámbito municipal, quienes se encargan de bregar por los intereses del municipio y la calidad de servicios para la incesante masa de turismo que cada día llega a Fiambalá.
De igual forma, algunas personas interesadas en concesionar este lugar, habrían hecho saber su descontento por la falta de información y difusión del mencionado llamado a licitación, señalando a algunos funcionarios de “silenciar” la situación para otorgar a personas que serian de sus afinidades.
Cabe resaltar que el contrato de concesión de dicho comedor caducó hace más de seis meses y hasta la fecha no logran regularizarlo. Es por eso que la Comisión Evaluadora trabaja contra reloj para transparentar la realidad.
Seguramente desde el municipio, en las próximas horas mediante una conferencia de prensa, se dará a conocer detalles de esta situación para aclarar los malos entendidos donde se habla de monopolios en las concesiones.
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