El sangriento ataque ocurrió cerca del lugar donde 118 personas fallecieron en mayo pasado en otro atentado similar atribuido a Boko Haram, que mantiene una feroz ofensiva en Nigeria, donde quiere imponer un Estado islámico, en el país más rico y poblado de África, en el que viven unos 80 millones de musulmanes.
En Kano, capital del homónimo estado del norte nigeriano, la policía detuvo hoy a una chica de 13 años que llevaba un cinturón de explosivos y que acudió un hospital de la zona, informaron autoridades.
La detención de la chica se produce un día después de que explosivos que llevaban dos mujeres estallaron en un concurrido mercado de Kano, causando la muerte de ellas mismas y de otras cuatro personas y decenas de heridos.
Hace menos de dos semanas, más de 120 personas murieran y más de 200 resultaron heridas por la explosión de bombas llevadas por mujeres en una mezquita de la ciudad de Kano.
Estos atentados suicidas, todos ellos cometidos fuera de los tres estados del nordeste -Borno, Yobe y Adamawa- que son feudos de de Boko Haram, hacen temer que las acciones del grupo se extiendan a todo el país.
Si bien en ninguno de los ataques las kamikazes dejaron mensaje alguno que permita decir si actuaron movidas por una ideología fundamentalista, varios elementos parecen indicar que se vieron obligadas a ello.
Debido a la corta edad de las kamikazes de Kano, medios de prensa nigerianos destacaron la posibilidad de que puedan formar parte de las más de 200 estudiantes secuestradas por Boko Haram en Chibok, en Borno, en abril pasado.
Boko Haram, cuyo nombre significa en lenguas locales "la educación no islámica es pecado", mantiene una sanguinaria campaña que causó más de 3.000 muertes en lo que va de año, y 12.000 desde que irrumpieron en la escena nigeriana, en 2009.
El gobierno del presidente Goodluck Jonathan, muy criticado por su falta de reacción tras el secuestro de las chicas y los siguientes ataques de Boko Haram, aseguró en varias ocasiones que liberaría a las estudiantes.
En octubre pasado anunció que había llegado a un acuerdo de paz con Boko Haram, pacto que incluía la liberación de las menores capturadas, pero el líder del grupo, Abubakar Shekau, lo negó.
Fuente: Télam