Fuentes de seguridad citadas por la agencia de noticias EFE dijeron que el ataque ocurrió en el barrio de Khazimiyah, en el norte de Bagdad, y que fue cometido por un atacante suicida que hizo estallar un cinturón de explosivos que llevaba adherido.
Khazimiyah es escenario frecuente de atentados de islamistas radicales sunnitas contra peregrinos chiitas que lo frecuentan para visitar el santuario del imán Musa al Kazem, el séptimo de los doce imanes chiitas.
Los atentados y la violencia contra la mayoría chiita, que controla el gobierno iraquí, y efectivos de las fuerzas del orden han aumentado en Irak, y la ONU dijo esta semana que 1.075 personas murieron en el país en lo que va del mes, la mayor cifra desde la retirada de las tropas estadounidenses, en 2011.
El ataque suicida de hoy coincide con una ofensiva del grupo insurgentes sunnita Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), contra el Ejército y otras fuerzas leales al gobierno del primer ministro Nuri al Maliki.
Desde el pasado 10 de junio, cuando tomaron la segunda ciudad iraquí, Mosul, los insurgentes han pasado a controlar distintas partes del país y amenazan con tomar Bagdad y los santuarios chiitas de Najaf y Kerbala, al sur de la capital.
El gobierno chiita ha respondido a la ofensiva islamista con bombardeos de artillería y ataques aéreos contra posiciones insurgentes en las ciudades que controlan.
La violencia amenaza con reeditar una ola de enfrentamientos entre los chiitas y la numerosa minoría sunnita que dejó a Irak al borde de la guerra civil en 2006 y 2007, un temor que ha aumentado con el descubrimiento, en días recientes, de cadáveres de hombres acribillados a balazos y abandonados en la calle.
Hoy, las autoridades descubrieron los cuerpos baleados de ocho hombres de unos 30 o 40 años en Mahmudiyah, 30 kilómetros al sur de Bagdad, dijeron fuentes médicas y policiales citadas por la cadena CNN.
Los hombres no tenían consigo ningún documento de identidad, agregaron las fuentes.
Fuente: Télam