"No he podido ir a trabajar por culpa de la visita de Obama, así que hoy no voy a ganar dinero"Aloo Joaz, mecánico
El fuerte operativo de seguridad incluyó el cierre del tráfico aéreo desde varias horas antes del arribo de Obama, mientras que la principales arterias de la capital, así como barrios completos, fueron cerrados al tránsito de vehículos y peatones y permanecerán así hasta que el presidente abandone Nairobi el domingo próximo.
Ese día se aplicarán las mismas medidas para la maniobra de despegue que lo alejará de la tierra donde nació su padre y lo llevará a Etiopía, país que también visitará por primera vez un presidente estadounidense activo.
La agenda de Obama incluye una participación mañana en la Cumbre Mundial de Emprendedores (GES) -organizada de forma conjunta por Estados Unidos y Kenia- y un acto en el que rendirá tributo a las víctimas y sobrevivientes de los atentados de 1998 contra las embajadas estadounidenses en Nairobi y Dar es Salaam (Tanzania), donde murieron 229 personas.
También se reunirá con el presidente Kenyatta, quien le ofrecerá una cena de Estado, informó la agencia de noticias EFE que cita un comunicado de la Casa Blanca.
El movimiento habitual de Kenia se vio sacudido por la llegada de Obama y todo el despliegue de seguridad dispuesto a lo largo de los lugares por los que transitará la caravana presidencial en la capital.
Algunos comerciantes se quejaron porque los cortes de tránsito perjudican el ritmo habitual de la ciudad, que hoy amaneció desierta, con un clima de domingo, debido a la imposibilidad de los habitantes de llegar a sus trabajos.
Si bien el vocero del gobierno keniano, Manoah Esipisu, anticipó ayer que la jornada de hoy no era "una festividad pública", la mayoría de oficinas y establecimientos se vieron obligados a suspender sus actividades por las dificultades para desplazarse.
"No he podido ir a trabajar por culpa de la visita de Obama, así que hoy no voy a ganar dinero", se quejó Aloo Joaz, un mecánico que trabaja en una zona industrial de Nairobi a la que hoy era imposible llegar.
Sin embargo, otros kenianos celebraron la llegada de Obama y consideraron que merece todas las medidas de seguridad adoptadas para protegerlo.
Lejos de la capital, el Ejército estadounidense patrulla las aguas kenianas y el espacio aéreo de Kenia y de la vecina Somalia, mientras soldados y policías kenianos supervisan la frontera entre ambos países, objetivo de constantes ataques por parte de la milicia yihadista Al Shabaab.
El grupo radical somalí sigue siendo la principal amenaza para Kenia, a quien exige la retirada de sus tropas de Somalia, y este fin de semana también para el presidente de Estados Unidos, cuya embajada emitió hace días una alerta advirtiendo de la posibilidad de ataques durante su visita a este país.
Fuente: Télam