Por su parte, el ministro de Comunicación Iván Canelas, señaló que este incremento garantiza inversiones públicas centradas en proyectos de infraestructura e industrialización. Para el 2011, se ha previsto un crecimiento económico de al menos 4 por ciento.
El líder de la COB, Pedro Montes anunció al respecto: "Hemos resuelto en este ampliado general firmar el acuerdo COB-Gobierno y por lo tanto se suspenden todas las medidas de presión (...), la decisión la han firmado todas las organizaciones que participan dentro de la COB".
La huelga de más de una semana no afectó las labores productivas, el comercio, la banca, ni el transporte en el país andino.
El reajuste salarial, que podría llegar a 12 % para maestros y trabajadores de salud si el Gobierno consigue recursos adicionales, no alcanzará a los funcionarios de los ministerios ni a los trabajadores de las empresas públicas de producción, como petroleros y mineros y sólo servirá como referencia en el sector privado.
Lo que es más, en la asamblea general de confederaciones en la COB quedaron aislados los sindicatos de línea dura de maestros y trabajadores de la salud, que llamaron a continuar las protestas, aunque no estaba claro cómo serían estas demandas.
La Federación de Mineros, histórica "vanguardia de la COB", se había anticipado al "ampliado" ordenando el retorno a sus bases de las delegaciones de dirigentes que habían participado en las protestas callejeras de la última semana en La Paz.
"En esto el que sale más beneficiado es el Gobierno, pero también hay que entender que esto será momentáneamente, porque sin duda tendrá un efecto boomerang", dijo la senadora Centa Rek, de la opositora Convergencia Nacional. Rek advirtió que "a corto tiempo el pueblo cuestionará a las autoridades y dirigentes sindicales que firmaron este acuerdo tan fácilmente".
Por su parte, la senadora oficialista Gabriela Montaño dijo que la huelga finalizó con "un acuerdo que mantiene equilibrios en el ámbito del manejo económico del Estado". (Infobae)
