Morales pidió el miércoles al canciller, David Choquehuanca, que notificara a la Usaid que debía dejar Bolivia, tras acusarla de injerencia política y conspiración, denuncia que Estados Unidos rechazó.
Días atrás, la ministra de Comunicación, Amanda Dávila, indicó que la cancillería iba a dar plazo a la Usaid para que saliera del país y que iba a considerarse el "tema humano" en esa decisión.
La oficina de la Usaid en Bolivia tiene nueve funcionarios estadounidenses y 37 bolivianos.
Bolivia y Estados Unidos no tienen relación del nivel de embajadores desde 2008, cuando Morales expulsó al representante estadounidense, Philip Goldberg, acusándolo de una supuesta conspiración, y Washington replicó echando al delegado boliviano, Gustavo Guzmán.
Ese mismo año, Morales expulsó de Bolivia a la Agencia Estadounidense Antidrogas (DEA, en inglés).
Fuente: Télam