Los rebeldes están cometiendo una "nueva violación de la tregua" en vigor desde el viernes, causando, además de las víctimas, daños materiales, en particular en la iglesia, agregó la versión oficial divulgada por la afencia Efe , CNN y Europa Press.
Por su lado, los alzados en armas contra el gobierno, controlado desde hace más de medio siglo por un mismo partido, denunciaron que hoy por la mañana se había bombardeado barrios residenciales de Damasco y Alepo.
Según estas fuentes, en la capital siria se contaron al menos quince explosiones en menos de una hora, pero no se contabilizaron muertos.
La violencia volvió a romper la tregua iniciada el viernes, a instancias del enviado de la ONU Lajdar Brahimi, derramando más sangre en un conflicto que ya ha costado 30.000 vidas en 18 meses.
La tregua fue establecida por cuatro días, con motivo de la fiesta musulmana del Aid Al Adha. Ambos bandos se comprometieron a respetarla, pero las dos partes se reservaban el derecho de responder en caso de violación del cese al fuego.
Según el ejército, las violaciones al cese al fuego se produjeron por culpa de los "terroristas", nombre dado a los insurgentes, que atacaron posiciones o patrullas de las fuerzas armadas.
El Observatorio de Derechos Humanos, organismo que actúa como vocero de los alzados desde Londres, acusó al gobierno de romper la tregua y aseguró que sólo el viernes se habían producido 150 muertos civiles.
El mismo organismo precisó que además habían muerto 43 soldados por la acción de francotiradores o en los diferentes combates registrados en el país.
Fuente: Télam