Cameron expresó "con respeto" que no está de acuerdo con el líder religioso y que los planes económicos y sociales del gobierno "buscan hacer lo correcto".
"Esto es claro en los beneficios sociales, donde el argumento moral es tan importante como hacer que las cifras tengan sentido", indicó.
El jefe del Partido Conservador manifestó que "no son ciertas" las palabras del reverendo Nichols, quien había dicho que con sus ajustes el gobierno "retiró la red de seguridad" a las familias más pobres.
"Nuestras reformas sociales brindan un nuevo propósito, una nueva oportunidad y una nueva esperanza, además de una nueva responsabilidad a aquellos que habían sido olvidados", sostuvo.
"Están en el corazón de nuestro plan económico a largo plazo, pero también en el corazón de nuestra misión moral y social de la política", añadió.
Nichols, la figura más importante de la Iglesia Católica en Inglaterra y Gales y que el viernes será designado cardenal por el papa Francisco, señaló que fue "inundado" de mensajes de personas "a las que se les quitó el apoyo, que pasan hambre y que fueron dejadas en la indigencia".
"Algo tiene que estar mal cuando la administración de un sistema tiene ese efecto en las vidas de tantas personas", apuntó.
Según un estudio del Instituto de Estudios Fiscales (IFS), el poder adquisitivo promedio en el Reino Unido se redujo un 6% desde la recesión de 2008, lo que afecta especialmente a familias de bajos ingresos que fueron golpeadas por los ajustes en los beneficios sociales.
Las políticas de austeridad comenzaron con la llegada del actual gobierno en 2010, pero se profundizaron en abril del año pasado con recortes en la ayuda para la vivienda, salud y discapacidad, entre otros puntos.
Fuente: Télam