El nuevo ataque talibán en Kandahar comenzó hacia el mediodía local cuando dos insurgentes activaron la carga explosiva que portaban en un vehículo.
El estallido se siguió de choques armados entre otros talibanes y fuerzas de seguridad en puntos cercanos al recinto oficial, como un mercado y un restaurante, dijo un portavoz de la policía, Zia ul Haq Durani.
El portavoz dijo a la agencia de noticias EFE que el ataque finalizó tras dos horas de combates y que la zona quedó bajo control de las fuerzas de seguridad, y añadió que siete policías y nueve civiles resultaron heridos.
Según un informe de la ONU publicado hoy, el número de muertos civiles aumentó un 17 % en la primera mitad de 2014 con respecto al año anterior en Afganistán, donde fallecieron 1.564 civiles, mientras que los heridos aumentaron un 28 % hasta los 3.289.
Los datos muestran una preocupante situación en el país asiático después de que el año pasado las fuerzas de seguridad afganas se hicieran responsables de la seguridad ante la retirada de las tropas de la OTAN en Afganistán, prevista para fines de 2014.
Estados Unidos ha anunciado que a pesar de la retirada internacional mantendrá unos 9.800 soldados en el país hasta completar su salida total a finales de 2016.
Además, el país se encuentra inmerso en una crisis política con el rechazo del candidato de las elecciones presidenciales Abdullah Abdullah a la victoria de su contrincante Ashraf Gani por supuesto fraude.
Fuente: Télam