Chávez calificó esa jornada como "un día de dignidad" que dio comienzo a la "revolución bolivariana", afirmó que los hechos del 4 de febrero de 1992 partieron "en dos la historia" venezolana del siglo XX y aseguró que los sacrificios "valieron la pena".
El presidente, ahora presionado por la oposición para dejar él mismo el poder, hizo un acto en las cercanías del Museo Histórico Militar de Caracas, donde Chávez se rindió al fracasar aquel golpe.. (Télam-SNI)