La decisión de renunciar al Pacto -que desde 1948 aceptaba la jurisdicción de la CIJ- fue adoptada a raíz del fallo del tribunal que entregó a Nicaragua una vasta zona del mar Caribe en la que Colombia ejercía soberanía desde 1803.
"He decidido que los más altos intereses nacionales exigen que las delimitaciones territoriales y marítimas sean fijadas por medio de tratados, como ha sido la tradición jurídica en Colombia, y no por sentencias proferidas por la Comisión Internacional de Justicia", explicó Santos en una reunión con productores de café.
Reveló entonces que ayer su administración "denunció el Pacto de Bogotá", a través de un aviso que se le entregó al secretario general de la OEA, el chileno José Miguel Insulza, consignaron las agencias DPA y EFE.
El Pacto de Bogotá fue suscrito en la capital colombiana el 30 de abril de 1948 durante la IX Conferencia Panamericana, considerada como la génesis de la OEA.
La ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, María Ángela Holguín, había anticipado que su país consideraba la posibilidad de retirarse del Pacto de Bogotá para evitar un futuro reclamo de Nicaragua ante la CIJ en busca de jurisdicción sobre territorios marítimos caribeños sobre los cuales Bogotá tiene soberanía.
Nicaragua demandó a Colombia ante el tribunal de La Haya en 2001 tras desconocer el tratado bilateral Esguerra-Bárcenas, que en 1928 ratificó la soberanía colombiana sobre el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, que en 1803 fue dejado por la corona española en manos de la Real Audiencia de Santafé de Bogotá.
Fuente: Télam