El canciller malayo, Syed Hamid Albar, destacó que los países ricos quieren dar lecciones a los Estados en vías de desarrollo en materia de derechos humanos mientras en sus propias casas aumentan "los actos de racismo, discriminación, xenofobia y otras formas de intolerancia".
En la inauguración de esta reunión de dos días que precederá al encuentro de jefes de Estado de la próxima semana, el jefe de la diplomacia malaya resaltó la preocupación por la enorme aceptación que tienen en los países ricos los partidos políticos que apuestan por la superioridad racial y las discriminaciones étnicas. (Télam-SNI)