Agregó que la aseveración la hace el Ministerio Público "con el fundamento de tener concluidos los dictámenes forenses, morfológicos, radiológicos, métricos y además la pericia de la odontología forense".
Barrow, de 58 años, dirigía un programa en un canal de televisión local y además era ingeniero agrónomo y docente universitario.
El día de su secuestro, en las cercanías del Estadio Olímpico Metropolitano, en el extremo sur de San Pedro Sula, se conducía en una camioneta con dos familiares suyos y su chófer.
Los captores abandonaron a los familiares del periodista y a él lo llevaron hacia otro extremo, siempre al sur de San Pedro Sula, en una zona de plantaciones de caña de azúcar.
Por su parte, el director de la Policía Nacional, Juan Carlos Bonilla, dijo que ayer martes por la tarde se terminaron de hallar los restos del periodista, cuyo cuerpo fue desmembrado.
La cabeza, el tronco y las extremidades fueron apareciendo poco a poco, dijo, en bolsas de plástico en una pequeña laguna cercana a unos cultivos de caña en la comunidad denominada Siboney.
De acuerdo con las autoridades, ya fueron identificadas ocho personas que participaron directamente en el crimen de Barrow, quien después de ser asesinado con arma de fuego fue quemado parcialmente y después desmembrado.
El director de fiscales agregó que gracias a información de un "testigo protegido", que también participó en el crimen pero decidió colaborar e informar a las autoridades, han sido identificadas "ocho personas que participaron directamente en la ejecución de Barrow", tres de las cuales están prófugas.
Por su parte, el comisionado de Derechos Humanos, Ramón Custodio, dijo que la muerte de Barrow "debe ser un aldabonazo a la conciencia cívica de todos" y que "ha llegado el momento de ponerle punto final a la violencia en este país".
Según el organismo que preside, en los últimos cuatro año fueron asesinados 28 periodistas, lo que coloca a Honduras como el país con la tasa per cápita más alta de homicidio de hombres de prensa y, en general, de muertes violentas de personas.
En junio el presidente del Colegio de Periodistas de Honduras, Juan Ramón Mairena, manifestó su preocupación por la impunidad que prevalece en el asesinato de periodistas, pues las propias autoridades reconocieron en abril que 80 por ciento de estos homicidios quedó sin castigo y la mayoría, incluso, sin investigación.
Como parte de esta ola de violencia, el periódico local El Heraldo informó que hoy murieron en forma violenta seis personas sólo en Tegucigalpa, a menos de 24 horas de que el presidente Porfirio Lobo asegurara que "los índices violentos son parte del pasado", y a cuatro meses de las elecciones generales de noviembre.
Fuente: Télam