Este texto, que endurece las condiciones de inspecciones en Irak, extendiéndolas a todos los palacios presidenciales, destaca que Bagdad sigue violando los mandatos de la ONU e indica que el Consejo de Seguridad le quiere dar "una última posibilidad" para cumplir con sus obligaciones.
La diferencia básica entre este borrador y los dos anteriores es que Estados Unidos debió ceder a las presiones de Rusia y Francia y se manifiesta ahora dispuesto a aceptar que la eventual ofensiva contra Irak sea resuelta en una segunda etapa. (Télam-SNI)