La Fuerza Aérea y la Marina brasileña informaron que en 26 días de trabajo se rescataron del mar 51 cadáveres y más de 600 destrozos del avión que se precipitó al mar cuando cubría el trayecto entre Rio de Janeiro y París.
"Hace nueve días que desde los barcos y los aviones no se avistan cadáveres, por lo que no existe más posibilidades de encontrar restos de las víctimas de la catástrofe", dijo el teniente coronel Henry Munhoz, portavoz de la Fuerza Aérea, según publica el portal de Ansalatina.
Los restos recolectados del mar estaban a unos 1000 kilómetros al noroeste de la costa brasileña. Al menos 14 cadáveres fueron identificados hasta el momento por el cuerpo forense de la Policía Federal brasileña en la ciudad de Recife.
Los militares brasileños realizaron tareas de reconocimiento y recolección de restos durante 26 días.
El portavoz informó que un submarino y buques franceses continúan en la zona donde cayó el avión buscando la caja negra, en una región donde la profundidad puede llegar al os 3.000 metros.
Francia, según las leyes internacionales, es responsable por la investigación de la catástrofe aérea.
En 26 días de operación la Fuerza Aérea brasileña utilizó 12 aviones y contó con apoyo aéreo de Francia, Estados Unidos y España, con 1.500 horas de vuelo.
La Marina brasileña puso a disposición de las búsquedas 11 barcos de guerra que recorrieron 35 mil millas, ocho veces la extensión de la costa brasileña, se informó en un comunicado.
