Martínez destacó que tal posibilidad, que fue bien recibida por los negociadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) "responde a la aceptación popular" y reveló que "se discutió" con los mandos militares del país.
"Las Fuerzas Armadas, encabezadas por el general Javier Florez, están diseñando la estrategia para asegurar a los colombianos que como producto de la negociación se silencien los fusiles", añadió el ministro.
En su primera alocución del 2015, Santos dio la orden a los negociadores en el proceso de Paz en La Habana, para que inicien cuanto antes la discusión del siguiente punto en la agenda de diálogo relacionado con el cese bilateral e indefinido al fuego, que supondría un trascendental y acaso definitorio eslabón para llegar a un acuerdo definitivo después de meses y meses de febriles negociaciones.
"Les he dado instrucciones a los negociadores para que inicien lo más pronto posible la discusión sobre el punto del cese de fuego y hostilidades bilateral y definitivo", puntualizó el gobernante, en una crucial decisión está siendo evaluada por la guerrilla seguramente de un modo celebratorio, según reporta radio Caracol.
En tal sentido, Santos volvió a destacar elogiosamente el cese al fuego unilateral e indefinido decretado por las FARC, evaluando que "ha sido un paso en la dirección correcta".
"Hasta ahora, las FARC, tenemos que decirlo, han cumplido", aceptó el Presidente.
Resaltó además los avances en la agenda de negociaciones en los últimos dos años y aseguró que "ya comenzamos a trabajar en los acuerdos sobre la forma en que se hará el abandono de armas y la reintegración a la vida civil de quienes abandonen la lucha armada", los otros puntos pendientes de resolución de las negociaciones.
El mandatario aprovechó para referirse a las últimas declaraciones del ELN sobre la disposición de considerar el abandono de las armas, y en tal sentido dijo que "esperamos concretar pronto con ellos los puntos de la agenda que nos permitan lograr ese propósito".
Ante la eventualidad de lograr el tan anhelado objetivo, Santos confió en que el 2015 "será el año de la paz, el que permita que se firme el acuerdo que ponga fin al conflicto" y sentenció que "ese es el gran reto que todos los colombianos tenemos por delante".
"Este puede ser uno de los años más trascendentes en la historia de nuestro país", exaltó.
Las FARC, por su parte, tomaron con beneplácito la declaración del Presidente, remarcaron que podría constituir el preludio del fin de la guerra, pero asimismo aclararon que "nos parece contradictoria y temeraria la orden de intensificar las acciones ofensivas estando la guerrilla en tregua", consignó la agencia EFE.
Santos, en otro orden, destacó su deseo de aprovechar esta oportunidad para expresar su solidaridad con el pueblo francés por los trágicos hechos de la semana pasada.
"Francia nos ha dado una lección. Ante el uso de una violencia arbitraria y brutal contra sus ciudadanos, la respuesta ha sido unidad. Con marchas masivas en las calles el pueblo francés en toda su diversidad ha dicho no a la violencia, sí a la unidad", ponderó.
Por último, y al enumerar otros aspectos relacionados con su gobierno, Santos dijo que "seguiremos impulsando el crecimiento económico, y destinaremos un presupuesto histórico para mejorar la calidad de vida de nuestros campesinos, así como su acceso a la tierra y a recursos para cultivarla".
A su vez, admitió que la caída del precio del petróleo, que está afectando a gran parte del mundo, "nos pega duro y tendremos menos ingresos" y resaltó que "vamos a profundizar el trabajo por la seguridad, que es una gran preocupación para la ciudadanía".
Fuente: Télam
