La medida afecta a los hospitales Infanta Leonor (Vallecas), Infanta Sofía (San Sebastián de Los Reyes), Infanta Cristina (Parla), Hospital de Henares (Coslada), del Sureste (Arganda del Rey) y del Tajo (Aranjuez).
La renuncia a este proyecto le costó el cargo al consejero de Sanidad de Madrid, Javier Fernández Lasquetty, quien dijo que se marchaba por "sentido de la responsabilidad", al no haber podido completar el proceso privatizador, que defendió por razones de ahorro económico.
El anunció llegó sólo unas horas después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid resolvió desestimar el último recurso presentado por el Ejecutivo madrileño y las empresas que hace seis meses se adjudicaron el servicio sanitario contra la suspensión del proceso privatizador.
La privatización de los hospitales públicos fue uno de los primeros anuncios que hizo González cuando asumió su cargo en sustitución de Esperanza Aguirre
En septiembre de 2013, la justicia madrileña resolvió suspender las privatizaciones de forma cautelar argumentando que si no se adoptaba la medida se podría llegar a una situación de no retorno, de cambio de modelo, y por lo tanto, "jurídicamente irreversible".
Además, en su resolución, el tribunal enterró el argumento del gobierno conservador de que la privatización de la gestión de los hospitales era una garantía de "ahorro", puesto que proyectos similares no han conseguido ese objetivo.
La medida cautelar había sido solicitada por la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM), que considera que la privatización de la gestión de los hospitales "vulnera los derechos fundamentales" de los trabajadores, y especialmente de los pacientes, al crear un ´apartheid´ sanitario, por dejar la salud en manos de empresas privadas.
La paralización judicial se produjo cuando el gobierno regional había finalizado el proceso de adjudicación con tres empresas -Ribera Salud, Bupa Sanitas y el grupo Hima San Pablo, de Puerto Rico- tras diez meses de conflicto laboral, que incluyó varios días de huelga y movilizaciones multitudinarias de la famosa "Marea Blanca" de trabajadores sanitarios y médicos.
El proceso sufrió marchas y contramarchas, pero tras el nuevo fallo judicial, González reconoció que se crea "una situación de incertidumbre y falta de seguridad".
El dirigente conservador, no obstante, volvió a defender el proyecto afirmando que "este es un modelo de gestión legal y posible, que está contemplado en la ley y está siendo aplicado por toda las administraciones públicas", e incluso en otros hospitales de Madrid.
A pesar de creer que tiene la razón, el Ejecutivo madrileño desiste de continuar con la batalla, lo que pone fin a más de un año de conflicto con el sector sanitario, que desde el inicio se opuso a la privatización de los hospitales.
La privatización de los hospitales públicos fue uno de los primeros anuncios que hizo González cuando asumió su cargo en sustitución de Esperanza Aguirre en octubre de 2012.
Desde entonces, el dirigente del PP no hizo más que fracasar con sus políticas. Entre sus más sonoras derrotas figuran la idea de implantar el "euro por receta", la candidatura de los Juegos Olímpicos de 2020, y Eurovegas, el mega proyecto turístico y de ocio que prometía invertir 6.000 millones de euros en la región y que finalmente se retiró.
Fuente: Télam