En una entrevista concedida a TVN, el conocido como “el conductor” pidió “cárcel pública” para sus empleadores y por momentos se mostró quebrado.
“La actitud de Bohn y Kemedy fue muy poco humana, y ellos lo saben. Saben que está mal, saben que todo lo que se ha hecho ahí, se ha hecho en vía de malas gestiones laborales. Gracias a Dios la gente ha conocido muchas verdades”.
“Tienen que hacerse responsables y ser hombrecitos para sus cosas, reconocer que ellos han quebrado empresas por no pago. Por lo menos respeto por la vida que no han demostrado. Porque para bien y para mal todos son empleados que cumplen órdenes y todos estamos de una u otra forma porque tenemos necesidades laborales y sueños, y por eso estamos ahí. Nunca desconfiamos, uno pensaba que esto iba a mejorar”, señaló con la voz entrecortada por el llanto.
Pese a mostrarse profundamente angustiado por el episodio del que le tocó ser víctima, “el conductor” señaló que no guarda odio ni envidia hacia los dueños del yacimiento San José.
“A Bohn no lo odio ni lo envidio, porque sino sería ser estúpido, sería mandar todos los valores que tengo por la borda. No tengo odio porque creo que Dios hace justicia”, agregó.
Al ser consultado si tuviera la posibilidad de decidir sobre el futuro de Bohn y Kemedy, Sepúlveda dijo: “Cárcel, cárcel pública, porque los delincuentes están ahí. Me van a disculpar por lo que digo, pero estoy muy sentido porque mi sueño quedó ahí abajo y los sueños de mis compañeros también, de gente que no queremos más que trabajar”.
La tristeza de Sepúlveda
“Lo único que le pedimos a Dios, y fue colectivo, que nos sacaran para que otra gente hiciera algo por nosotros”, relató el minero.
El obrero admitió que en varias ocasiones siente que desearía estar bajo tierra, en la mina, atrapado.
“Si me preguntan si prefiero estar aquí o estar adentro, por el sacrificio que hizo la gente, digo que no, pero por Mario y por las cosas tan hermosas que vivimos dentro de la mina y por juntarme con gente que terminé amando, optaría por estar abajo. Una vez que tú sales de ahí ya no cuentas con esa humildad”, afirmó.
Sepúlveda vaticinó lo que está ocurriendo con muchos de sus compañeros: “Todos nosotros hicimos lo imposible para sobrevivir juntos, y lo que más les dije fue que lo que nos espera allá afuera es muy fuerte, es peor que acá. Les advertí que ´allá afuera va a haber alcohol, mujeres inescrupulosas que se van a acercar, pero por favor no nos olvidemos de que nosotros anduvimos con ojotas y de los valores que nos enseñaron nuestro viejos´”.
Fuente: Cadena 3