Este mastín tibetano fue vendido por el criador de perros Lu Liang a un magnate del carbón afincado en el norte de China, ¿Su precio? 10 millones de yuanes; al cambio, más de un millón de euros.
¿Pero porqué el animal es tan caro?, sus criadores explican que tiene cualidades genéticas y su inmaculado pedigrí como las razones de tal desembolso.
Do-khyi será un gran semental, está destinado a ello, y no sería de extrañar que, más que un capricho, pronto se convirtiera en un gran negocio, otro más, de su nuevo y orgulloso propietario.
Fuente: 26noticias.com.ar