Cascella informó que Napolitano no comparecerá ante los medios, como es habitual, para informar sobre las consultas, que terminaron sin resultados concretos, por lo que se profundiza la inestabilidad gubernamental, que puede ser decisiva para el futuro de la zona euro, de la Italia es la tercera economía.
Napolitano celebró una nueva ronda de contactos con las principales fuerzas, un día después de que el secretario general del Partido Democrático (PD), Pier Luigi Bersani -líder de la centroizquierda y vencedor en los comicios, pero sin los números necesarios en el Senado para su investidura-, fracasó en su búsqueda de apoyos para la formación del Ejecutivo.
Todos los partidos políticos se mantuvieron firmes en las posiciones que habían defendido hasta ahora, lo que deja a Napolitano en una complicada situación y como principal responsable de la búsqueda de la salida al bloqueo que arrojaron los comicios celebrados el 24 y 25 de febrero pasado.
El ex premier Silvio Berlusconi, líder de la coalición de centroderecha, la segunda fuerza más votada, propuso la formación de un gobierno de unidad nacional con Bersani como primer ministro, tras insistir en que es la única salida, durante la reunión que mantuvo con Napolitano, la primera de la jornada.
De la reunión también participaron el secretario general del partido de Berlusconi, Pueblo de la Libertad (PLD), Angelino Alfano; y el secretario general de la Liga Norte (LN), principal socio del ex premier.
"Estamos disponibles para que el Partido Democrático (de Bersani) presente su candidatura, tanto si se presenta él como si lo hace otro candidato", afirmó Berlusconi tras reunirse con Napolitano.
Pero, el PD de Bersani, la principal fuerza de la coalición de centroizquierda, reiteró que un gobierno de unidad nacional con las fuerzas de mayor representación parlamentaria en Italia, entre ellas la de Berlusconi, no es la solución idónea, durante la última reunión que Napolitano mantuvo en Roma.
"Las fuertes diferencias entre las fuerzas políticas hacen que un Gobierno de unidad nacional con las fuerzas políticas tradicionales no sea idóneo", explicó el vicesecretario del PD, Enrico Letta, que fue a la cita con Napolitano, en lugar de Bersani, que no acudió al encuentro, informó la agencia de noticias EFE.
Asimismo, Letta advirtió que "los demasiados ´no´ recibidos en los pasados días" durante la ronda de consultas conducida por Bersani, después de que Napolitano le encargara la búsqueda de apoyos para la formación de su gobierno, y los "no" escuchados durante la jornada de hoy, ponen en peligro la posibilidad de "cambio" que exigieron los ciudadanos a través del voto.
La propuesta de Berlusconi también fue rechazada por el antisistema Movimiento 5 Estrellas, la tercera fuerza parlamentaria liderada por el cómico Beppe Grillo, que insistió en la propuesta de un gobierno propio y en su rechazo a apoyar un Ejecutivo formado por "políticos o pseudotécnicos".
El que sí apoyó la propuesta de un gobierno de unidad nacional fue el partido de centro Elección Cívica, liderado por el primer ministro italiano en funciones, el tecnócrata Mario Monti.
"De nuevo hemos manifestado (a Napolitano) nuestra total disponibilidad a construir una gran coalición de las tres grandes fuerzas (parlamentarias) disponibles", dijo el coordinador de Elección Cívica, Andrea Olivero, en coincidencia con la posición de la coalición de centroderecha de Berlusconi.
Olivero destacó además la necesidad que tiene Italia de contar con un nuevo Gobierno estable y en un plazo breve.
"El rechazo de las diferentes fuerzas políticas por causa de intereses partidistas y las divisiones ideológicas impiden que se forme un Gobierno estable, mientras que nosotros consideramos que existe una necesidad de Gobierno estable y en tiempos ciertos", afirmó, citado por EFE.
Sin embargo, Berlusconi descartó la formación de un nuevo gobierno de tecnócratas como el que lidera Monti.
"Debe ser político. Basta de técnicos", afirmó en respuesta a las preguntas de los periodistas, informó la agencia de noticias EFE.
Ahora, Italia celebra tres jornadas festivas con motivo de la Pascua católica, por lo que se desconoce si el jefe del Estado comparecerá mañana o lo hará una vez que pasen las festividades.
La tercera economía europea, afectada por la crisis financiera que castiga a zona, acarrea además una gigantesca deuda pública, por lo que mantiene al resto del bloque inquieto ante la incertidumbre política.
La reapertura de la Bolsa de Milán, muy pendiente del resultado de estas consultas, no se producirá hasta el próximo martes.
Fuente: Télam
