El máximo titular de la OEA, felicitó a su vez a Obama "por haber dado estos pasos históricos, tan necesarios como valientes, para restablecer unas relaciones diplomáticas rotas en 1961", siendo que "se trata de una decisión de enorme altura de miras por ambas partes".
Insulza, señaló que las decisiones anunciadas hoy "abren una vía de normalización que ya no tiene vuelta atrás", y bajo este escenario solicitó al congreso estadounidense "adoptar las medidas legislativas necesarias para levantar el embargo en contra de Cuba, que aún permanece en vigor".
"El Presidente Obama ha sido claro sobre la necesidad de cambiar una política que durante 50 años no produjo beneficios ni dio resultados, y sólo complicó la vida de millones de ciudadanos. Esperamos que el Congreso también lo entienda así", afirmó.
El titular de la OEA, manifestó a su vez su alegría por la liberación del ciudadano estadounidense, Alan Gross y los cubanos Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, y mencionó que su prisión "fue producto de un pasado que no debe volver".
El Secretario General, alabó también "el papel desempeñado por la comunidad internacional para facilitar las conversaciones entre Washington y La Habana", y animó a ambos gobiernos "a seguir apoyándose en sus países vecinos y amigos para seguir alcanzando acuerdos que conduzcan a la plena normalización de los contactos entre dos países clave en nuestra América".
Insulza, recordó por último la decisión adoptada por unanimidad entre todos los Estados miembros de la institución interamericana, de dejar sin efecto la suspensión de Cuba como miembro activo de la OEA, adoptada en la Asamblea General de Honduras en 2009.
"Fue un paso temprano para acercar a la nación caribeña a la comunidad de países que integran el Organismo Hemisférico", concluyó el funcionario.
Fuente: Télam