Así lo reveló hoy la cadena BBC, que detalló que en los últimos meses el Ministerio de Defensa y los abogados de las víctimas buscan llegar a un acuerdo por una compensación económica.
El defensor de una de las familias calificó el monto como "irrisorio" y señaló que "es un insulto para aquellas personas que perdieron la vida".
Un pequeño grupo de manifestantes católicos empezó a lanzar piedras contra el Ejército británico, que primero respondió con gas y balas de goma y luego abrió fuego contra la multitud.
En total, 14 personas fallecieron, la mitad adolescentes, y 13 resultaron heridas.
Un primer informe desligó a las autoridades británicas de los hechos, pero un segundo trabajo, tras 12 años de investigación, determinó que las muertes fueron "injustificadas".
Al publicarse ese informe, en junio de 2010, el primer ministro británico, David Cameron, pidió disculpas públicas en nombre del gobierno del Reino Unido.
Fuente: Télam