La pequeña se salvó gracias a que primero un toldo del Café Le Vincennes frenó su caída de 15 metros. Al parecer, ese fin de semana quedó extendido porque su manivela había sufrido una falla electrónica.
Luego, Idris rebotó y milagrosamente cayó en los brazos del Doctor Philippe Bensignor, que caminaba por la esquina de la rue des Pyrennes y la cours de Vincennes.
El hombre fue considerado un héroe por su acción. "Debe haber jugado al rugby durante años para tener unos reflejos tan desarrollados como eso", dijo un testigo que presenció el incidente.
Según las hipótesis, la beba jugaba en el balcón de su departamento, en el séptimo piso de un edificio, junto a su hermanita de cuatro años y con sus padres ausentes por estar haciendo compras.
La menor, que no tiene heridas graves tras la caída, permanece en observación en un hospital francés, informa el sitio de la cadena española Tele5.
Fuente: infobae.com