La demostración tuvo lugar mientras el gobierno comunicaba por escrito al Morena su rechazo a la posibilidad de convocar a una consulta popular para convalidar las modificaciones al sector energético, que junto a la educativa y a la fiscal constituyen las tres grandes reformas alentadas por Enrique Peña Nieto.
López Obrador, líder del Morena tras haber abandonado el Partido de la Revolución Democrática (PRD) por el que fue dos veces candidato presidencial, propuso a sus seguidores que votaran tres alternativas de protesta.
Una de ellas es rodear pacíficamente las sedes del Congreso federal y de las 32 legislaturas regionales, con el objeto de evitar la votación de la reforma energética, que aún está en debate parlamentario.
En tanto, la segunda alternativa incluye una campaña en redes sociales y una concentración en el Zócalo, la plaza principal del distrito federal, el 27 de este mes, y la tercera consiste en combinar las dos anteriores, describieron las agencias de noticias DPA y EFE.
"También vamos a estar llamando a echar abajo la mal llamada reforma educativa"Manuel López Obrador
"También vamos a estar llamando a echar abajo la mal llamada reforma educativa", señaló López Obrador, pese a que ese conjunto de normas ya fue sancionado por el parlamento.
Paralelamente, Peña Nieto -del centrista Partido de la Revolución Institucional (PRI)-, a través de una carta de su secretario privado, Edwin Lino, rechazó la posibilidad de convocar a una consulta popular sobre la reforma energética, que le habían solicitado por escrito los dirigentes del Morena Agustín Ortiz, Bertha Luján y Octavio Romero, consignó la agencia ANSA.
Peña Nieto envió al Senado su proyecto de reforma energética, que prevé participación de capitales privados en el monopolio petrolero estatal.
La iniciativa implica una modificación de la Constitución, pues ésta prohíbe inversiones extranjeras en el sector petrolero.
Por otra parte, dirigentes del Partido Acción Nacional (PAN, conservador) encabezados por su presidente, Gustavo Madero, salieron a las calles para convocar a los ciudadanos a una "cruzada" contra el cobro del IVA sobre los servicios educativos, el final de un régimen fiscal especial para la región fronteriza y otros contenidos del proyecto de reforma fiscal.
Madero afirmó que la iniciativa no fue consensuada por los partidos sino que es una propuesta unilateral del gobierno y el PRI, y sostuvo que afecta a la economía del país.
"Vamos a hacer esta gran cruzada para generar una conciencia en el gobierno federal, en el PRI y en el PRD para que nos acompañen; ni un solo voto a esta reforma que daña a la clase media y daña a la economía", dijo Madero sobre el proyecto que será votado el 20 de este mes en Diputados.
Fuente: Télam
