En Al Raqa, el comandante de las fuerzas kurdo sirias Unidades de Protección del Pueblo, Ridor Jalil, dijo por teléfono a la agencia de noticias EFE que sus milicianos arrebataron después del mediodía al EI el control de la localidad de Ain Aisa.
La localidad, que se encuentra a medio camino de las regiones de Al Yazira y Kobani, dos de los principales enclaves kurdos del país árabe, está ubicada a sólo 50 kilómetros de Al Raqa, capital de la provincia y del califato proclamado el año pasado por el EI en las zonas de Siria e Irak bajo su control.
En los últimos días, el avance de las Unidades de Protección del Pueblo, ayudadas por rebeldes de otras facciones y la coalición internacional, liderada por la aviación de Estados Unidos, resultó imparable para los yihadistas del EI.
Los ataques aéreos de la coalición se cobraron las vidas de, al menos, 26 integrantes del EI en Ain Aisa, cuyos cadáveres llegaron anoche a la ciudad de Al Raqa.
Los yihadistas del EI destruyeron hoy dos mausoleos islámicos ubicados en las afueras de Palmira
Jalil precisó que la toma de Ain Aisa por parte de sus fuerzas fue rápida, tras la caída anoche en sus manos de la base de la antigua brigada 93 del Ejército sirio, en poder del EI y en las afueras de esta población.
Asimismo, precisó que los yihadistas se retiraron al este y al norte de Ain Aisa y que dejaron la localidad repleta de minas.
Hace una semana, las Unidades de Protección del Pueblo entraron en la provincia de Al Raqa, controlada totalmente por el EI, y arrebataron a los extremistas el dominio de varias poblaciones, entre ellas Tel Abiad.
Tel Abiad se encuentra en la frontera con Turquía y era el lugar por donde pasaba una de las principales vías de suministros de los extremistas.
En Palmira, en la provincia central de Homs, el EI destruyó dos mausoleos islámicos que estaban en sus afueras y a los que consideraban sacrílegos. Sin embargo, las autoridades sirias aseguraron que las ruinas grecorromanas no sufrieron daños.
El director de Antigüedades y Museos de Siria, Maamoun Abdulkarim, explicó que "la parte arqueológica de Palmira está intacta, aunque el grupo terrorista (Estado Islámico) colocó allí explosivos en los últimos días".
Abdulkarim, en declaraciones a la agencia de noticias EFE, señaló que los dos santuarios islámicos destruidos son el de Mohamed bin Ali y el de Nizar Abu Baha Edin, fuera del sitio arqueológico por el que es conocida Palmira.
Un activista de la opositora Red Sham, Samer al Homsi, había informado por Internet desde la provincia de Homs que ambos mausoleos fueron destruidos anoche.
Abdulkarim confirmó estos datos y agregó que ambos mausoleos eran edificaciones modernas, aunque los restos que contenían eran antiguos.
Palmira fue en los siglos I y II d.C. uno de los centros culturales más importantes del mundo antiguo y punto de encuentro de las caravanas en la Ruta de la Seda, que atravesaban el árido desierto del centro de Siria.
Antes del inicio de la contienda siria, en marzo de 2011, sus ruinas eran una de las principales atracciones turísticas del país y de la región.
El EI, que a mediados de mayo se hizo con el control de la población de Palmira y de la zona monumental, difundió el 26 de mayo un video con supuestas imágenes de las ruinas en el que aparentemente no se apreciaban daños.
Los ataques aéreos de la coalición se cobraron las vidas de, al menos, 26 integrantes del EI en Ain Aisa
Entretanto, el EI instó hoy a los musulmanes a llevar a cabo ataques con motivo del mes de ayuno de Ramadán, que empezó la semana pasada, en una grabación de audio difundida por internet de su portavoz, Abu Mohamed al Adnani.
En la cinta, cuya autenticidad no pudo ser comprobada, Al Adnani felicita a los fieles por la llegada del Ramadán y les anima a "conquistar en este mes sagrado y a exponerse al martirio".
Mientras tanto, en Londres, la organización Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) dio a conocer hoy que al menos 162 civiles murieron desde el inicio de los bombardeos en septiembre pasado de la coalición internacional liderada por Estados Unidos contra el EI en Siria.
De acuerdo a este informe, 2.896 personas, entre civiles y yihadistas, perdieron la vida desde el comienzo de los ataques aéreos, el 23 de septiembre del año pasado, hasta esta madrugada.
Entre los civiles, hay al menos 51 menores de edad y 35 mujeres, que en su mayoría perecieron por los bombardeos contra instalaciones petroleras tomadas por el EI en las provincias de Al Hasaka, Deir Ezzor, Al Raqa, Alepo e Idleb, todas ellas en el norte de Siria.
El Observatorio hizo mención especial a una masacre cometida por la coalición internacional entre los pasados 30 de abril y 1 de mayo en la aldea de Bir Mahali, en Alepo, donde al menos 64 ciudadanos perecieron.
El EI, por su parte, sufrió al menos 2.628 bajas en sus filas, la mayoría extranjeros, aunque no descartan que el número de muertos sea superior debido al secretismo que mantiene la organización extremista sobre sus bajas.
Fuente: Télam
