Sin embargo, al mismo tiempo se aprestaba a combatir a todos los rebeldes mediante la ocupación con 3.600 soldados de dos zonas de seguridad bajo control militar.
El vicepresidente colombiano, Francisco Santos, dijo hoy a la prensa que "el gobierno ha sido clarísimo en que hay que eliminar los factores de violencia vengan de donde vengan (...) y siempre ha estado abierto a la salida negociada". (Télam-SNI)