Según fuentes del Ministerio de Finanzas citadas por la prensa local, el Ejecutivo barajó en principio la posibilidad de no contestar a las peticiones de los prestamistas y esperar a la reunión del Eurogrupo que se celebra el lunes, pero finalmente se optó por enviar el mensaje.
Estas mismas fuentes aseguraron que Atenas quiso dar la imagen de que contribuye a los esfuerzos para lograr un acuerdo que permita avanzar en las negociaciones y la vuelta de los acreedores al país, informó la agencia de noticias EFE.
El viceprimer ministro griego, Evángelos Venizelos, indicó ayer que la troika podría regresar a Atenas antes de las fiestas de Navidad para reanudar la evaluación del programa, al tiempo que aseguró que no habrá nuevos ajustes fiscales ni más recortes de salarios y pensiones.
El Parlamento griego vota mañana los presupuestos para 2015 que no cuentan con el visto bueno de la troika, cuyas recetas incluyen ajustes el saneamiento del presupuesto público a expensas del gasto social, impuestos regresivos, recortes en educación, salud o previsión social, flexibilidad laboral, etc.
Los prestamistas consideran que de cara a 2015 Grecia tendrá una brecha fiscal de hasta 3.600 millones de euros, un agujero que Atenas niega y que es el principal escollo para reanudar la revisión.
Está previsto que el Eurogrupo trate, en su reunión del lunes, la prórroga del rescate, que según fuentes de la CE, podría prolongarse hasta seis meses.
Según los planes actuales, el siguiente paso del programa, es una línea de crédito con condiciones reforzadas del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), en que también participará el FMI y que deberá ser aprobada por los parlamentos nacionales de la zona euro y solicitada oficialmente por Grecia.
Fuente: Télam