Unos 59.000 refugiados ingresaron en Croacia desde que Hungrí­a cerró su frontera con Serbia, el 15 de septiembre.
"No es suficiente decirle al mundo a través de la prensa lo que estamos haciendo y por qué", dijo el conservador Orban en declaraciones a periodistas en Viena, luego de reunirse con su par austrí­aco, el canciller federal socialdemócrata Werner Faymann.
"Tenemos que ir a todos lados y recabar apoyo antes de que tenga lugar el cierre (de la frontera)", añadió, citado por la agencia de noticias EFE.
El cierre de las fronteras entre Hungrí­a y Serbia desató un penoso efecto dominó en el sureste de Europa del cual los refugiados se llevaron la peor parte.
El gobierno croata primero dio la bienvenida a los migrantes, pensando en que seguirí­an camino hacia la vecina Eslovenia, al norte de Croacia, y desde allí­ a Austria y Alemania, el destino preferido de los solicitantes de asilo que han inundado Europa este año.
Pero Eslovenia se negó a permitirles pasar, lo que dejó en manos de Croacia, uno de los paí­ses más pobres de la Unión Europea (UE), la responsabilidad de lidiar con la marea humana.
A falta de una respuesta unificada europea para lidiar con la crisis, Croacia comenzó a trasladar a los migrantes y refugiados hacia Hungrí­a, que los deja pasar y los conduce hacia Austria.
Orban dijo que la situación en los paí­ses que están recibiendo a los migrantes, es decir Austria y Alemania, también es delicada.
El premier agregó que la propuesta de Croacia de establecer un "corredor humanitario" para los refugiados a través del territorio de ambos paí­ses en dirección a Austria, y luego Alemania, va en contra de cualquier norma europea, informó la agencia de noticias EFE.
Sin embargo, aclaró que si Austria y Alemania aceptaban esa posibilidad, Hungrí­a estarí­a dispuesto a considerarla.
Orban indicó que Faymann rechazó esa medida y le aseguró que las normas europeas sobre asilo siguen vigentes, por lo que ese corredor no se aplicará.
"Austria no quiere un corredor, pero tampoco quiere vallas. Austria no quiere nada, al parecer", declaró con ironí­a.
Faymann y otros funcionarios austrí­acos han criticado las vallas levantadas por Hungrí­a en sus fronteras con Serbia y Croacia y sus planes de construir otra en el lí­mite con Rumania.
En alusión a estos cuestionamientos, Orban dijo que Hungrí­a ha estado recibiendo "fuego amigo en nuestras espaldas" de parte de Austria cuando lo único que está haciendo -según el premier- es tratar de cumplir con la normativa de inmigración y asilo europea.
Austria "denegó su amistad a Hungrí­a en tiempos particularmente difí­ciles y yo he venido a restaurar la anterior condición", señaló el primer ministro húngaro.
Sobre la tensa relación con Faymann, Orban manifestó que está dispuesto a olvidarlo todo, incluso las palabras en las que el austrí­aco comparó la actitud húngara con la de "las épocas más oscuras" de Europa, en referencia a los nazis y sus aliados.
Una comparación que, dijo, es especialmente llamativa viniendo de un polí­tico austrí­aco.
El socialdemócrata Faymann, en declaraciones a periodistas formuladas por separado, describió la relación con Hungrí­a como "correcta", pero también dijo que habí­a "tensión".
Agregó que su reunión con Orban "demuestra que tenemos que hablar", informó la agencia de noticias estatal austrí­aca APA.
El premier de Austria dijo que las medidas adoptadas por Hungrí­a para controlar sus fronteras eran legales, pero subrayó que el derecho de asilo es un derecho humano y llamó a Orban a honrar las leyes que garantizan la libertad de movimientos en la zona de pasaporte libre europea y las que tutelan el derecho de asilo.
Orban, sin embargo, insistió en que levantar vallas en las fronteras es una forma efectiva de controlar la llegada de refugiados y confirmó que, una vez que consulte con sus aliados en Europa del Este, cerrará la delimitación con Croacia, al igual que hizo la pasada semana con Serbia.
Croacia, en tanto, cedió a la presión de la Unión Europea (UE) y reabrió está tarde "sin restricciones" dos de los pasos fronterizos con Serbia que habí­a cerrado en el marco de una disputa desatada por la crisis de refugiados, informó el ministro del Interior croata, Ranko Ostojic, en la cuenta del Gobierno en Twitter.
Croacia informó que planea levantar "hoy o mañana" el bloqueo a la entrada de vehí­culos serbios en el paí­s, poco después de que la Comisión Europea (CE) solicitara a Zagreb aclaraciones urgentes a las autoridades croatas.
Fuente: Télam