Rezaian, de 39 años, fue acusado por la fiscalía e Teherán de "espionaje" por haber recopilado información sobre temas de "política interna y exterior" iraní, y suministrarla a "personas indebidas"
Medios iraníes, que describen a Rezaian como "un espía estadounidense", adelantaron que el periodista que posee ciudadanía estadounidense e iraní podría recibir una pena de hasta 20 años de cárcel efectiva, según la cadena de noticias CNN.
Bajo el sistema legal iraní, Rezaian tiene 20 días para apelar cualquier fallo.
Rezaian, de 39 años, fue acusado por la fiscalía e Teherán de "espionaje" por haber recopilado información sobre temas de "política interna y exterior" iraní, y suministrarla a "personas indebidas", así como "cooperar con estados hostiles" y emitir propaganda contra la República Islámica".
Los rumores sobre un veredicto comenzaron a circular en los medios internacionales ayer, aunque, según el vocero del Departamento de Estado estadounidense, John Kirby, el gobierno del presidente Barack Obama no tiene constancia de "ninguna confirmación oficial ni detalles de ningún veredicto específico de las autoridades iraníes", según explicó en un comunicado.
Por su parte, Alì Rezaian, el hermano de Jason, también aseguró ayer que ni él ni su familia habían recibido "un aviso" de que habría un anuncio sobre el caso, a dos meses de que haya terminado el juicio, según la agencia de noticias EFE.
Desde el Washington Post, el editor ejecutivo, Martin Baron, repudió la condena, a la que calificó como "una injusticia indignante".
"Esta declaración vaga y desconcertante del gobierno de Irán se suma a la injusticia que ha rodeado el caso de Jason desde su arresto hace 15 meses", indicó Baron en un comunicado.
"Lo único que siempre ha estado claro en este caso es la inocencia de Jason. Si en efecto se emitió un fallo y se está revisando, esto acentúa la responsabilidad de los líderes de Irán de demostrar que la Justicia sólo podría llevar a la exoneración y liberación de Jason", agregó.
Rezaian fue detenido junto a su esposa, la corresponsal del diario emiratí The National Yeganeh Salehi, el 22 de julio del año pasado, el mismo día que fueron arrestados una fotógrafa que había trabajado para The Washington Post y su esposo.
Excepto Salehi, todos ellos tienen doble nacionalidad iraní y estadounidense, algo la República Islámica de Irán no reconoce.
La fotógrafa y su esposo fueron liberados semanas más tarde, mientras que Salehi fue puesta en libertad bajo fianza a principios del pasado octubre.
En los últimos meses, en el marco del descongelamiento de las relaciones entre Irán y las potencias occidentales iniciado por la firma de un acuerdo nuclear, varios líderes en Teherán han deslizado la posibilidad de liberar a Rezaian en un intercambio de prisioneros con Estados Unidos.
Hace apenas unas semanas, el presidente de Irán aseguró en una entrevista con la cadena estadounidense CBS que ellos "también tienen muchos iraníes detenidos en Estados Unidos, iraníes que son juzgados por no cumplir con las sanciones" internacionales, que Washington y el resto de la comunidad internacional impuso a Teherán para obligarlo a limitar su programa nuclear.
"No me gusta particularmente la palabra intercambio, pero desde una perspectiva humanitaria, si podemos dar un paso, debemos hacerlo. El lado estadounidense debe tomar sus propios pasos", agregó, sugerente.
Fuente: Télam