En una conferencia de prensa televisada desde la Casa Blanca, Obama afirmó que los términos de la resolución de la ONU "no son negociables" y si Gadafi se niega "la comunidad internacional impondrá consecuencias, la resolución será aplicada a través de acción militar".
Asimismo, el mandatario norteamericano remarcó que su país "no va a ingresar a Libia, no va a usar la fuerza para lograr la pacificación", informó la agencia de noticias ANSA.
No obstante, aseguró que desde Estados Unidos "no" permitirán que Gadafi "siga presionando y matando a su gente" y subrayó que "una vez más el presidente libio ignoró el pedido de la comunidad internacional y continúa con una campaña contra su propia gente".
"Nosotros no vamos a tener piedad con esto", insistió el mandatario norteamericano, quien recalcó que "para nada" su país va a estar a merced de estas muertes y presiones.
Obama precisó que a partir de mañana se reunirá son sus aliados de la comunidad internacional "para ver qué medidas tomar".
"Tanto los aliados de los Estados Unidos como el resto de las naciones están tomando medidas para proteger a los ciudadanos; queremos que termine la violencia contra los ciudadanos porque se usa la fuerza para presionarlos", agregó.
En ese sentido, Obama instó al líder libio a tomar "medidas urgentes para terminar con esta violencia".
"Gadafi tiene una oportunidad para resolver esto", destacó Obama, al tiempo que consideró que "con disturbios no se puede negociar".
Antes de dirigirse a su comunidad, Obama se reunió con congresistas republicanos y demócratas, entre ellos los líderes de las mayorías en el Senado, Harry Reid, y en la Cámara de Representantes, John Boehner.
El mandatario explicó a los legisladores las opciones que tiene Washington y cuáles son los límites a los que someterá a su misión militar a Libia, principalmente el de no participar en combate cuerpo a cuerpo. Actualmente, Estados Unidos tiene 96.000 soldados en Afganistán y 50.000 en Irak. (Télam).